El gobernador Omar Perotti se refirió, esta mañana, a Armando Traferri y la situación por la que atravesó (y atraviesa) el senador sanlorencino luego de ser acusado por fiscales rosarinos como integrante de una asociación ilícita dedicada al juego clandestino.
Señaló que el legislador tiene la posibilidad de demostrar su inocencia (lo cuál no hizo ya que se escudó en sus fueros) y que no se trata de una interna partidaria, tal como apuntó el senador.
“Esto no es una interna de un partido, se está corriendo el eje. Esta es una cuestión de decencia y que no haya vínculos entre el Estado y la corrupción”, expresó durante una entrevista que brindo al medio santafesino Aire de Santa Fe. “Se necesita aire fresco. Esto es como una enredadera que se metió por todos lados y que hay que cortar. En Santa Fe cambiaron las reglas de juego después de muchos años y eso no todos lo entendieron”, agregó.
– Volvería a dar ese discurso tan duro en la Legislatura, cuando planteó el pacto de gobernabilidad entre el Estado y el delito, con duras críticas a la gestión de Lifschitz.
– Desde el 2011 lo vengo diciendo y estoy más convencido que nunca. Desde hace muchos años vengo planteando el tema del narcotráfico y me valió muchas críticas en los medios del sur de la provincia. Yo no me senté ese día ni se me ocurrió en los días previos a ese mensaje qué iba decir. Hay que cortar el vínculo con el delito que nos carcome como si fuera un ácido la institucionalidad en la provincia de Santa Fe. No tiene que haber privilegios para nadie. Esa tarea tengo que llevarla adelante y ojalá los que vengan después sigan en este camino.
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– Es un dirigente que tiene la posibilidad de demostrar que es inocente. En el vínculo con el delito hubo fiscales, la misma policía -tuvimos que pasar a retiro a muchos jefes- y hubo responsables políticos en la conducción de esa fuerza. Esto no es una interna de un partido, se está corriendo el eje. Esta es una cuestión de decencia y que no haya vínculos entre el Estado y la corrupción. Que los buenos policías puedan trabajar con libertad, sin temor que los trasladen. Tenemos que recuperar este espíritu. Se necesita aire fresco. Esto es como una enredadera que se metió por todos lados y que hay que cortar. En Santa Fe cambiaron las reglas de juego después de muchos años y eso no todos lo entendieron.
– ¿Qué le diría a Traferri café de por medio?
– No voy a personalizar una circunstancia como si fuera un hecho. Le diría que se ponga a disposición, pero mi pregunta apunta a todo el sistema político en esto de por qué dejamos que esto fuera tan lejos. Como sociedad nos cabe esta reflexión.
– ¿Cómo llegamos a tener dos fiscales detenidos?
– Son explicaciones que deberían dar quienes tomaron la decisión de enviar y aprobar esos pliegos. Todos podemos equivocarnos, pero creo que tenemos que encontrar la forma de que haya mecanismos que nos garanticen un mayor nivel de contralor. No hay protección ni privilegios para nadie, se puede investigar todo y nadie arriba va a parar una investigación. Esto no es una interna de un partido, se está corriendo el eje. Esta es una cuestión de decencia y que no haya vínculos entre el Estado y la corrupción.
– ¿Está de acuerdo con que los legisladores controlen a los fiscales?
– Es un sistema que necesita su instancia de contralor y quizás haya que mejorar la ley y esto no tiene que asustar a nadie. – ¿Cuándo habló por última vez con la vicegobernadora Alejandra Rodenas?
– Hace un día hablé con Alejandra Rodenas, yo no dejo afuera a nadie. Es fundamental que la política de señales y aporte a lo que necesita la sociedad en temas claves. La ley de conectividad, por ejemplo, no podemos seguir demorando con un tema tan importante y que se financia con un crédito muy conveniente. El Senado ya le dio media sanción y no es un tema que requiera demasiada discusión. Lo mal que estamos en conectividad quedó al desnudo durante la pandemia, tenemos que reaccionar más rápido. Y lo va a usar más el gobierno que viene que yo.