“Es cualquiera lo que está pasando. Hoy no pensaba hablar de nada, pero está dando vuelta en todos lados y ya es cualquier cosa. Mañana me van a inventar con Susana Giménez, pasado con Mirtha Legrand… Están diciendo cualquiera. No tengo absolutamente nada que ver con Rocío Oliva, más allá de haber trabajado juntos”, dijo anoche Horacio Cabak en Polémica en el Bar, luego de que comenzaran a circular rumores que lo vinculaban sentimentalmente con la ex de Diego Maradona. También se señaló a su vestuarista como una presunta tercera en discordia en su matrimonio con Verónica Soldato.
Esta mañana, la ex esposa del conductor de La jaula de la moda volvió a hablar a través de Ángel de Brito, y fue contundente al asegurar que no hay vuelta atrás en la relación: “De ninguna manera me voy a arreglar con Cabak. De ninguna manera voy a seguir con alguien que me engañó constantemente, que tiene una doble vida. Quizás fui demasiado confiada. No quiero perseguir a nadie pensando todo el tiempo que me mete los cuernos, por eso no me voy a arreglar con Horacio”, dijo Verónica.
“Acá él lo tuvo todo y eligió eso. Ya se me pasará la angustia, pero yo me valoro y cada cosa que dicen las angelitas (por las panelista de LAM) es lo que pasó y lo que siento. Yo quise que se supiera todo esto”, reconoció.
Al respecto, sobre los motivos que la llevaron a hacer pública la ruptura, explicó: “Quise que se supiera para no quedarme con la angustia, porque si no, él se hubiera ido de casa y todo el mundo me hubiera preguntado a mí. Él es el culpable, él es el que trajo esta basura a la casa”. Además, pidió: “Me parece bien que se saque la careta de la cara y explique qué pasó. No lo odio. No puedo odiarlo todavía. Lo que más me preocupa son los chicos”.
El domingo, luego de que Cabak fuera dado de alta tras 12 días de internación por una complicación en su cuadro de coronavirus, a Verónica se le rompió el teléfono. El conductor le prestó un aparato que ya no usaba. Fue en ese momento en el que habría encontrado los chats comprometedores.