A pesar de la caída en las ventas de soja, para cuando acabe julio se estima que la agroindustria liquidará unos 3.000 millones de dólares, una cifra que pare l gobierno, ávido de recaudar lo más posible en la moneda norteamericana, no estará nada mal.
Hasta el pasado viernes, el sector llevaba liquidado uno 2.200 millones, y si bien se diferencia de mees anteriores, en el actual esquema económico, el monto podría ser menor.
Ante un escenario tan ambiguo, por ahora el campo espera y solicita medidas “correctivas” para el sector. El reciente anuncio del gobierno por un dólar diferenciado a su favor parecería no complacer sus expectativas y para el segundo semestre del año, las liquidaciones podrían ir reduciéndose.
De acuerdo a los datos revelados por el Ministerio de Agricultura de la Nación, queda por venderse casi 30 millones de toneladas de la oleaginosa, lo que en valores se traduce entre 12.000 y 14.000 millones de dólares.
“La soja se va a liquidar, nunca se guarda por guardar. Cuando inicie la próxima siembra, el productor venderá para financiarse. Es algo que sucede todos los años, pero ahora el Gobierno pone el foco ahí porque necesita más dólares”, explicó un referente de una de las agroexportadoras de la región, a Ámbito Financiero.