Jugada política

El paro de estibadores impacta en la reputación del puerto y desvío de cargas

El paro de estibadores impacta en la reputación del puerto y desvío de cargas

Puerto Rosario
Estiman que retomar la actividad normal del puerto va a llevar más de un año. El comunicado de la empresa concesionaria considera que la Comisión Directiva del sindicato está "presionada por bases auto-convocadas".
Estiman que retomar la actividad normal del puerto va a llevar más de un año. El comunicado de la empresa concesionaria considera que la Comisión Directiva del sindicato está "presionada por bases auto-convocadas".

El conflicto que mantiene, desde hace semanas, el sindicato de estibadores (SUPA) con la Terminal Puerto Rosario comienza a tomar una dimensión mucho mayor a la circunscripción de un diferendo local entre empresa y gremio, ya la falta de embarques y descargas pone en juego los compromisos y contratos de las empresas exportadores, en diferentes rubros de la actividad.

“Es un daño muy significativo para la actividad portuaria y principalmente para la reputación de la empresa”, resaltaron fuentes de ON24 allegadas al puerto, que sostuvieron que este nivel de conflictividad “genera dudas, incertidumbre y temores porque nadie sabe cómo va a terminar”.

Es que por un lado están las firmas que operan a través de TPR y, por otro, las navieras internacionales, que, si decidieran buscar otros puertos para llevar adelante su actividad, “recuperarlas después no es una cuestión sencilla, porque ¿cómo las seducís de nuevo?”, señalaron.

Cabe recordar que en 2015, TPR anunciaba el desembarco de las multinacionales Hamburg Sud y Maersk, que se sumaban en ese momento a MSC como tres de las navieras más importantes a nivel mundial con operaciones en la ciudad, hitos que posicionaban a la Terminal como un jugador de peso en la región en lo que refiere, principalmente, al negocio de contenedores y conectividad.

Hoy, con el paro del SUPA, el Puerto local “ha perdido muchas cargas” y hay buques que son derivados a terminales de Uruguay, incluso, según indicaron otras fuentes también allegadas a la actividad portuaria local. Contenedores de exportación con maní, carne, leche, autopartes, que están “totalmente parados” y reclamos de compañías como Renault hoy es el panorama complicado, al menos desde lo comercial, que atraviesa TPR.

“Retomar la actividad normal del puerto va a llevar más de un año”, estimaron, porque “las empresas dejan de tener un puerto confiable ante esta conflictividad y agresividad”, aseveraron.

COMUNICADO DE TPR

Ante la continuidad de las medidas de fuerza del SUPA, cuyo reclamo hoy radica en la reincorporación de algunos trabajadores que fueron despedidos por atentar contra empleados y bienes de TPR, la empresa concesionaria de los muelles I y II emitió un comunicado en el que expresó su vocación de diálogo y su decisión de no volver a emplear a las personas violentas.

“Se ha llegado a este punto de conflicto, porque la Comisión Directiva del SUPA, intempestivamente presionada por bases auto-convocadas, optó por cortar todos los caminos de diálogo que siempre existieron entre sindicato y empresa”, expresó el texto.

A su vez, ratificó que “no hay ni ha habido ningún plan sistemático de despidos”, aunque sí indicó que “verdaderamente TPR ha despedido y denunciado penalmente a los trabajadores que atentaron contra la vida de empleados y bienes de la empresa”, manteniendo su postura “de no reincorporación por tratarse de hechos absolutamente contrapuestos a los valores promovidos por la empresa y sus accionistas”.

También la empresa afirmó que en las sucesivas audiencias en los Ministerios de Trabajo de Nación y Provincia, “TPR ha estado constantemente acercando posiciones con propuestas superadoras, reconociendo la situación económica de nuestro país, y la necesidad de acompañar a nuestros trabajadores con una recomposición salarial acorde, con el puerto operando como corresponde”.

Pero subrayó que, “así como TPR defiende el derecho constitucional a huelga que le asiste a los trabajadores, también se ampara en su derecho de no abonar salarios a los empleados que se negaron a trabajar”, y aclaró que “el salario de noviembre y el medio aguinaldo de diciembre se pagaron en tiempo y forma, con solo el descuento de los jornales no trabajados”.

“TPR tiene, y siempre ha tenido, la voluntad de resolver este conflicto. Sabemos que son momentos difíciles, pero seguimos apostando al diálogo, sentido común y buena voluntad de todas las partes, por el futuro del puerto, la comunidad santafesina, en un ámbito de paz social”, finalizó la compañía portuaria en el comunicado.

 

Fuente: ON24