Como ocurre siempre para esta época del año, llegan a San Lorenzo contingentes escolares de todo el país para conocer los escenarios donde el general San Martín y sus granaderos libraron un combate histórico ante las tropas realistas el 3 de febrero de 1813. Pero esta vez hay una particularidad: llegan muchos más visitantes que en ocasiones anteriores.
El atractivo está a la vista y es un paisaje común para los sanlorencinos, pero para los visitantes se trata de una experiencia mágica y posiblemente única, ya que muchos quizás nunca más podrán repetirla: recorrer los pasillos que transitó San Martín, conocer la celda donde murió el capitán Justo Bermúdez, descubrir el campanario desde donde el Libertador observó los movimientos del enemigo, pisar el Campo de la Gloria…
A diferencia de lo que ocurre usualmente, este año hay más alumnos que en otras oportunidades. La explicación, según señalaron desde las agencias que coordinan los viajes, es que prefieren saltear la visita al Monumento a la Bandera por la crisis de seguridad que atraviesa Rosario.
Para no perder el viaje ya programado con bastante antelación, los operadores turísticos ofrecen a San Lorenzo como destino y las escuelas aceptan de inmediato. “Prefieren evitar ir a Rosario por la información que reciben de todo lo que ocurre allí. A padres y maestros les preocupa un poco todo lo que ven por televisión, entonces San Lorenzo se convierte en una gran opción. Hay grupos que antes hacían los dos destinos y ahora directamente eligen San Lorenzo”, señaló el titular de una de las agencias más antiguas en el rubro.