Un automovilista de 39 años que manejaba borracho y protagonizó una desenfrenada huída y luego un impresionante vuelco sobre la Ruta 9, terminó hospitalizado en la localidad de Carcarañá con custodia policial. Lo persiguieron desde Roldán y no pudieron darle alcance hasta que despistó y tumbó con un Ford Ka de color rojo.
El alcoholizado conductor pasó como tren bala por Ruta 9 e Ibarlucea. Venía por la banquina y no respetó el semáforo en rojo del cruce, en dónde estaba frenado un patrullero del Comando Radioeléctrico. Los agentes dieron aviso al 911 para iniciar una persecución controlada.
Tampoco pudieron darle alcance con otros móviles y con la Guardia Urbana de Roldán en el cruce de rutas 9 y A012. El automovilista oriundo de Granadero Baigorria siguió manejando por la zona céntrica de Roldán y continuó trayecto hasta San Jerónimo Sud.
En la primera curva de la Ruta 9 en la localidad, el huidizo conductor perdió el control del Ford Ka, mordió la banquina y dió varios tumbos hasta que quedó contra un árbol añoso. Los efectivos policiales dieron aviso a bomberos y servicios de emergencias para rescatarlo.
A pesar del tremendo vuelco, el automovilista estaba consciente y visiblemente borracho. Lo trasladaron en ambulancia al Samco de Carcarañá en dónde quedó en calidad de detenido por conducción peligrosa, informaron desde la Unidad Regional XVII.
