El pasado viernes a la noche el atentado criminal conta Brenda Giles en la ciudad de San Lorenzo cuando regresaba de trabajar fue un quiebre histórico para la administración y gobiernos de las ciudades de todo el Cordón Industrial, obligando para los próximos gobiernos deban cogobernar con el gobernador de turno para asegurar la paz social y la seguridad de los vecinos.
Pablo Javkin viene reclamando la autonomía de Rosario y la posibilidad de elegir los jefes de policías sin éxito para poder trabajar en los barrios más calientes de la ciudad que está tomada por el narcotráfico y la inseguridad, sumado al reclamo para que el estado federal baje con la fuerzas de seguridad y dote a la justicia federal de recursos para investigar el comercio de droga. Sabiendo que si el gobernador no colabora como fue en estos 4 años de Perotti no hay posibilidades de combatir el delito y por cual garantizar seguridad a los vecinos.
Por la tipología de los delitos, el aumento de la pobreza y sobre todo el crecimiento del crimen organizado no podrán los intendentes o presidentes comunales seguir haciendo gestiones con notas o llamados telefónicos a los funcionarios de turno como hasta ahora porque los resultados del fracaso están a la vista. Los gobernadores en su mayoría y sobre todo Omar Perotti trabajaron en la discriminación de las ciudades y pueblos con otro signo político, a las que tenían recursos propios las liberaron de policías y aquellas que necesitan recursos las fueron desgastando con el giro de recueros a cuenta gota.
Es imposible que la democracia termine siendo un juego de presiones donde los obreros para lograr aumento salariales deben bloquear empresas o cortar rutas, los beneficiarios de planes sociales sitiar ciudades enteras con piquetes y los jubilados o los autónomos sin posibilidades de reclamo terminen bajo la linea de la pobreza. El corte de la autopista para pedir que bajen policías a la ciudad de San Lorenzo fue un quiebre que debe considerarse para transformar la manera en que se gobiernan las ciudades y municipios en conjunto con los gobiernos provinciales.
En Santa Fe Pullaro se encamina a ser el próximo gobernador y tendrá la obligación de cogobernar con cada intendente y Presidente Comunal para “promover el bienestar general” consagrado en el preambulo de la constitución nacional constituido prioritariamente por la seguridad, la salud y la educación responsabilidades indelegables del poder provincial.
Estamos al borde del caos, hay una oportunidad histórica para los dirigentes y evitar que reine el caos, pero sólo una.
