Se destapó una olla

El jefe comunal de Andino dijo que sufrieron amenazas por preguntar sobre los desarrollos inmobiliarios en la zona

Desde que en las grandes ciudades se comenzó a perseguir y controlar el narcotráfico, se fueron corriendo a pequeñas localidades como Andino. Adempas desde la comuna confirmaron que existen inversiones inmobiliarias de dudosa procedencia

Mucha gente en los últimos tiempos ha invertido en casas de veraneo. En el lugar donde cayó el sicario, Mauricio ‘Canibal´ Laferrara era una de estas viviendas, a la orilla del río Carcaraña.

No es la primera vez que un hecho policial sucede en la localidad. Unos meses atrás un joven ligado a la bando de Los Monos fue asesinado durante una fiesta de cumpleaños. “Somos un pueblo receptivo de gente que viene a pasar el fin de semana en cabañas o casas de alquiler temporario y eso nos hace vulnerables” dice el presidente comunal Leonardo Tempesta.

Además indicó: “Tenemos en claro que ninguna inversión, que teóricamente ‘viene a salvar el pueblo’, vale la pena si está teñido de alguna sospecha de blanqueo de activos, detalló el funcionario municipal”.
“La sospecha de alguna inversión millonarias y en efectivo, con actitud avasallante da cuenta de que son de dudosa procedencia. Más que nada cuando piden las habilitaciones municipales”, describió el funcionario municipal.

Más detalladamente Leonardo Tempesta confió: “Hemos sufrido amenazas y cartas documento, por el solo hecho de preguntar. Sin ir más lejos, el funcionario se refirió a desarrollos inmobiliarios “que te lo pintan como ‘guau’, pero vos te das cuenta en el accionar, de que se trata si hay sospecha de lavado de activo”.

“Cuando se empieza a apretar en las grandes ciudades, estas organizaciones se van corriendo a pequeñas localidades, como la nuestra”, sentenció.

Finalmente, considero que están tratando de elaborar de un padrón que incluya los inmuebles que están ofrecidos en Facebook para alquilar. El objetivo final de este municipio es tener el control de los habitantes que llegan a la localidad, ejemplificando que al sicario recapturado, nadie lo vio comprando ni el pan.

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