La tranquilidad de la noche del lunes en la zona sudoeste de la ciudad se vio interrumpida cuando dos drones fueron detectados sobrevolando la Unidad Penal 5, ubicada en calle 27 de Febrero. El hecho, reportado cerca de las 21:00 horas, activó los protocolos de seguridad del Servicio Penitenciario, generando una rápida intervención.
El jefe de día del penal alertó sobre los dispositivos aéreos no autorizados, lo que motivó el despliegue de unidades móviles y patrullas externas para controlar la situación. Según informó el personal penitenciario, tras un seguimiento exhaustivo, uno de los drones fue derribado utilizando los métodos establecidos por las autoridades. Sin embargo, el segundo logró escapar antes de ser interceptado.
Este tipo de incidentes, que pueden representar intentos de ingreso de objetos ilegales o tareas de vigilancia ilícita, han llevado a reforzar las medidas de control aéreo alrededor de las cárceles en todo el país.
Aunque el dron derribado ya está en manos de las autoridades, se inició una investigación para identificar a los responsables detrás de estos vuelos no autorizados, mientras se evalúan mejoras en la seguridad de la zona.