La Sala Primera de la Cámara de Apelación en lo Civil y Comercial de Rosario emitió en noviembre de 2024 un fallo favorable a Celulosa Argentina S.A., destacando los avances realizados por la empresa en su adecuación tecnológica para cumplir con normativas ambientales.
El caso, iniciado como un amparo ambiental en 2007 por denuncias de vecinos por emisiones contaminantes, tuvo un fallo inicial en 2015 que ordenaba a la empresa cesar las inmisiones de compuestos reducidos de azufre (TRS) y adecuarse a los estándares establecidos. Desde entonces, Celulosa Argentina implementó un ambicioso plan de mejoras que implicó una inversión de 100 millones de dólares, destacando la adopción de tecnologías modernas como la eliminación del cloro elemental en su proceso productivo.
La Cámara reconoció que la empresa cumplió con los requisitos exigidos, incluyendo la obtención del Certificado de Aptitud Ambiental. Este documento, otorgado tras un riguroso monitoreo permanente por parte de las autoridades competentes, avala que Celulosa cumple con las mejores prácticas ambientales en su operación.
El fallo, firmado por los jueces Ariel C. Ariza, Oscar R. Puccinelli y María de los Milagros Lotti, pone fin a más de 17 años de conflicto judicial, consolidando el esfuerzo de la compañía por priorizar la sostenibilidad. Además, el tribunal destacó la colaboración técnica de organismos estatales y privados para validar las mediciones y avances de la empresa.
Con esta resolución, se cierra un capítulo emblemático para la industria y la comunidad, marcando un precedente sobre la importancia de la inversión en tecnologías limpias y la corresponsabilidad empresarial en el cuidado del medioambiente.
