El ingeniero Juan Carlos Bertoni, uno de los principales referentes en recursos hídricos del país, participó de una entrevista en Up River, el programa de Fisherton Plus conducido por Nicolás Carugatti y Jorge Metz, donde abordó la problemática de las inundaciones en Argentina y el reciente desastre en Bahía Blanca.
Durante la charla, Bertoni explicó que este tipo de eventos climáticos extremos no son exclusivos de una región y que, a lo largo de los años, han afectado diversas provincias, como Salta, Jujuy, Santa Fe, La Plata, Buenos Aires y Mendoza. En este sentido, sostuvo que “se hace uso y abuso del cambio climático como justificación”, cuando en realidad hay otros factores estructurales y de planificación urbana que agravan la situación.
El especialista recordó que ya en 2003 había publicado un libro sobre inundaciones urbanas en Argentina y que actualmente trabaja en una segunda edición con una visión más amplia e incorporando análisis de otras regiones de América del Sur.
Bertoni enfatizó que si bien el cambio climático existe y genera modificaciones en los patrones de lluvias, “su incidencia en una ciudad no es la misma que en un glaciar”. Según el ingeniero, el problema no radica únicamente en el aumento de precipitaciones, sino también en la falta de planificación, obras hídricas y mantenimiento de los sistemas de drenaje.
Urbanización desordenada y falta de planificación
En la segunda parte de la entrevista, Bertoni amplió su análisis señalando que Argentina es uno de los países más urbanizados de Latinoamérica, con casi el 94% de su población viviendo en ciudades. Sin embargo, cuestionó la falta de planificación en el desarrollo urbano:

“El crecimiento de las ciudades ha sido caótico, sin considerar las condiciones naturales del terreno. Se han ocupado zonas inundables sin evaluar los riesgos, y muchas veces los nombres de los barrios ya indican qué tipo de suelo era antes de la urbanización.”
Además, explicó que en el país aún persiste un modelo de urbanización que ya fue abandonado en las ciudades desarrolladas:
“En Argentina, urbanizar es sinónimo de impermeabilizar el suelo. Cada construcción sella el terreno con cemento, redirigiendo el agua de lluvia de los techos y las calles hacia los desagües pluviales sin dar tiempo a que el suelo la absorba. Lo que estamos creando son autopistas para el agua.”
Este fenómeno, según Bertoni, es una de las principales causas de inundaciones urbanas: el agua de las lluvias intensas no encuentra filtración natural y se desplaza a gran velocidad hacia los sectores más bajos, generando desastres.
Cómo se puede revertir el problema
Bertoni propuso un cambio de paradigma basado en soluciones ya aplicadas en ciudades más avanzadas. Una de ellas es el concepto de impacto hidrológico nulo, que implica que cualquier construcción debe garantizar que el volumen de agua que sale del terreno urbanizado sea el mismo que el que salía antes de la intervención.
“No se trata de impedir el desarrollo urbano, sino de hacerlo de manera inteligente. Así como nadie tira la basura a la calle inmediatamente después de usarla, deberíamos hacer lo mismo con el agua de lluvia: acumularla temporalmente y liberarla de forma gradual para evitar saturaciones en el sistema de drenaje.”
Entre las soluciones más efectivas mencionó:
- Uso de pavimentos permeables en veredas, estacionamientos y plazas.
Incorporación de reservorios pluviales en edificios y viviendas. - Tanques de acumulación subterráneos o en superficie para liberar el agua lentamente.
- Desarrollos urbanísticos que prioricen la absorción natural del agua en parques y espacios verdes.
“No tiene sentido que el agua de lluvia salga a la calle en cinco o diez minutos y genere un colapso en los desagües, cuando con un sistema más ordenado podríamos distribuir su evacuación en varias horas y evitar inundaciones,” concluyó Bertoni. podemos cambiar el titulo y la bajada