Carwyle fue presentado ante la Justicia este jueves en una escena insólita: compareció semidesnudo, cubierto solo por lo que parecía un acolchado, y mostró comportamientos erráticos que llevaron al juez a ordenar una evaluación mental. Su defensa, encabezada por la abogada Toral Malik, alegó que no está en condiciones de enfrentar un proceso penal sin dicha evaluación. El acusado se declaró no culpable de los cargos.
El incidente ocurrió a las 12:20 del mediodía del lunes, mientras Aniston se encontraba en su hogar. Un guardia de seguridad logró detener al intruso hasta la llegada de la policía. Aunque Carwyle no logró ingresar a la vivienda, causó “daños sustanciales” al portón y parte de la propiedad, según informó la Fiscalía de Los Ángeles. El fiscal general, Nathan Hochman, emitió un comunicado contundente: “El acoso puede escalar en actos peligrosos. Nuestra oficina tomará todas las medidas necesarias para proteger a las víctimas”.
La fianza fue fijada en 150.000 dólares y Carwyle enfrenta cargos por acoso agravado y vandalismo. Además, la fiscalía podría añadir el cargo de amenazas graves, lo que elevaría su posible condena a tres años de prisión. La próxima audiencia fue programada para el 22 de mayo en una corte especializada en salud mental. Aniston no asistirá, como tampoco lo hizo este jueves, delegando su representación legal a su equipo de abogados, que no emitió declaraciones.