San Lorenzo tiene superhéroes sin capa. Uno de ellos es, sin dudas, Héctor Gallucci, un vecino que dedicó su vida a sembrar valores y sonrisas a través del deporte. Este martes, a sus 93 años, recibió un reconocimiento histórico por parte del intendente Leonardo Raimundo, quien le otorgó un Diploma de Honor con la leyenda “Director de Deportes in aeternum”.
El acto se llevó a cabo en la Sala de Prensa municipal, con la presencia del subsecretario de Deportes, Roque Caballero, y del secretario de Coordinación General, Alejandro Cabral. En el homenaje, Gallucci recibió además dos fotografías: una del Sargento Cabral y otra propia, tomada en el acto donde el estadio cubierto del Polideportivo Municipal fue bautizado con su nombre.
Un pionero del deporte infantil
En la década del 80, cuando la ciudad apenas empezaba a pensar el deporte como una herramienta de inclusión social, Gallucci ya había dado el primer paso. Fue el creador de los torneos interbarriales y de las primeras colonias de vacaciones, programas que marcaron un antes y un después en la vida comunitaria de San Lorenzo.
“El reconocimiento es por todo lo que Héctor hizo durante muchos años por el deporte infantil. Es un ejemplo, una persona de bien”, expresó el intendente Raimundo, quien destacó el valor humano detrás de una gestión que dejó huella.
Un premio para toda una vida
Visiblemente emocionado, Gallucci agradeció el homenaje con palabras que reflejan su esencia:
“Para mí es una alegría inmensa. Es un premio que me ha dado la vida por lo que yo hice con el objetivo final de lograr la felicidad del niño a través del deporte y, finalmente, sacarlo de la calle. Quizás para ustedes no es nada, pero para mí es imborrable”.
A lo largo de más de cuatro décadas, su misión fue clara: el deporte como camino hacia la amistad, la integración y la esperanza. Hoy, su legado late en cada cancha de barrio, en cada chico que alguna vez jugó un interbarrial, en cada familia que encontró en el deporte un espacio de contención.
San Lorenzo reconoce así a uno de sus grandes referentes. Porque más allá de diplomas, títulos o cargos, Héctor Gallucci ya es eterno en el corazón de su ciudad.