Durante el acto, el mandatario destacó la importancia de garantizar la continuidad de los proyectos iniciados y remarcó el impacto económico y social de la inversión estatal. “Este es uno de los actos más emotivos para un funcionario: entregar la llave a familias que soñaron durante años con su casa propia”, afirmó Pullaro, quien subrayó que la construcción de viviendas “requiere un enorme esfuerzo de todos los santafesinos, en un momento muy difícil del país”.
“La obra pública sostiene el empleo y la economía”
El gobernador reafirmó que su administración puso el foco en sostener y ampliar la obra pública como política estratégica. “Hoy tenemos 3.500 obras activas en la provincia porque fuimos austeros y priorizamos lo que había que priorizar. La obra pública genera trabajo y ayuda a sostener una economía que lleva años de recesión”, sostuvo.
Pullaro también pidió “unidad y proyectos de largo plazo” para consolidar el crecimiento provincial. “Las obras que se empiezan, se terminan. Más allá de los colores políticos, trabajamos espalda con espalda para poner a Santa Fe en lo más alto del país”, concluyó.
Las voces de la comunidad
La intendenta Paola Devesa celebró la finalización del proyecto y valoró el impacto que tendrá en la localidad: “La vivienda es estabilidad, seguridad y sentido de pertenencia. Estas 34 unidades son el resultado del esfuerzo de muchas personas y merecen un reconocimiento colectivo”.
En la misma línea, el secretario de Hábitat y Vivienda, Lucas Crivelli, recordó que el barrio se inició en 2022, pero estuvo más de un año paralizado: “La decisión del gobernador fue clara: no podemos permitirnos obras inconclusas. Había que terminarlas y hoy estamos cumpliendo”.
La diputada provincial Jimena Senn destacó que la entrega representa “mucho más que un techo: es la posibilidad de construir un proyecto de vida y un futuro para cada familia”.
Cómo es el nuevo barrio
El conjunto habitacional está ubicado en las calles Bartolomé Blatter, 1º de Mayo, Padre Enrique Niemann y Pasaje Catalina Yossen.
Del total, 32 viviendas son compactas y 2 fueron diseñadas especialmente para personas con discapacidad, con baños adaptados, dos dormitorios y espacios más amplios. Todas disponen de aberturas de aluminio, mesada de acero inoxidable, lavadero y terminaciones estándar de calidad.
La obra también incluyó infraestructura básica para garantizar condiciones adecuadas de habitabilidad: red eléctrica domiciliaria, alumbrado público, agua potable, desagües pluviales, veredas, rampas de acceso y conexión a la red cloacal existente.
Con esta entrega, el gobierno provincial avanza en su política de reactivación de la obra pública y en la finalización de proyectos que habían quedado interrumpidos, con el objetivo de brindar soluciones habitacionales y dinamizar la economía local.







