La decisión del Gobierno nacional de habilitar a la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) a nominar en dólares los saldos a favor de exportadores, para recién poder compensarlos con tributos nacionales a partir de 2027, desató una fuerte reacción en el sector exportador. La Cámara de Exportadores de la República Argentina (CERA) calificó la medida como un “diferimiento encubierto” de las obligaciones del Estado y alertó por el creciente atraso en las devoluciones de reintegros y del recupero de IVA.
La disposición, anunciada esta semana, establece que ARCA deberá instrumentar un mecanismo para dolarizar saldos a favor y montos pendientes de reintegros a la exportación. Sin embargo, su utilización quedaría habilitada recién dentro de dos años, lo que implica que los fondos adeudados no estarían disponibles antes de 2027. La norma operativa aún no fue publicada por el organismo.
Desde CERA expresaron su rechazo inmediato: “La resolución sorprende pues, de alguna manera, efectúa un reconocimiento tácito de imposibilidad de cumplir la deuda con los exportadores”, señalaron en un comunicado difundido hoy.
Según la entidad, el sistema propuesto configura “un diferimiento adicional a tasa cero en dólares, pero de costo financiero real para el sector privado, en muchos casos de sostenimiento imposible”. Adujeron que la resolución permite al Estado “postergar, aunque sea parcialmente, obligaciones que debiera cumplir en tiempo y forma”.
El atraso en las devoluciones es significativo. Mientras el tipo de cambio de referencia (A3500 del BCRA) aumentó un 45,8% entre octubre de 2024 y octubre de 2025, la devolución de reintegros en el mismo período apenas llegó al 10,1%. Sectores exportadores claves se encuentran entre los más perjudicados: legumbres (reintegros del 1,25% al 3,25%), arroz envasado (1,25%), aceite de oliva (0,75% a 1,50%), harina de trigo (0,75% a 1,25%), malta (1% a 1,25%), maní confitería (1%) y aceite de girasol alto oleico (0,75%), entre otros.

CERA advirtió que el panorama genera “preocupantes interrogantes” sobre el futuro de los regímenes de reintegros y recuperos de impuestos, fundamentales para asegurar condiciones competitivas en el comercio internacional. Estos mecanismos están previstos tanto en las normas de la Organización Mundial de Comercio como en la legislación argentina.
“Desarrollar mercados requiere previsibilidad”, insistieron, y remarcaron la necesidad de una “reforma actitudinal” hacia el sector exportador. “La exportación no debe ser considerada solamente como generación de divisas ni como una solución financiera del Estado. Es una fuente vital de creación de empleo y desarrollo federal”, subrayó la cámara.
Concluyeron reclamando una política que permita al país competir “en un campo de juego nivelado, sin exportar impuestos y sin condicionamientos excepcionales”.







