Al llegar, los vecinos señalaron que el sospechoso había huido corriendo hacia la zona de barrio Granadero, vestido completamente de negro. Los móviles iniciaron un patrullaje, pero minutos después la central volvió a alertar que el mismo individuo habría ingresado nuevamente al local. Cuando los agentes regresaron, los vecinos indicaron que el ladrón se había vuelto a escapar, esta vez llevando un bolso voluminoso.

Durante la búsqueda, en Pellegrini al 547, a unos 600 metros del comercio, los efectivos hallaron un bolso de gran tamaño abandonado y vieron a un hombre vestido de oscuro dentro de una vivienda, intentando saltar hacia otro sector. Pese al ingreso inmediato de los uniformados y al rastrillaje realizado con apoyo de otras unidades, no lograron dar con el sospechoso.
En el interior del bolso se encontraron decenas de prendas nuevas de distintas marcas y colores, entre ellas buzos, camperas, remeras, suéteres, calzas y pantalones, todas pertenecientes al comercio violentado. En total se recuperaron más de 40 artículos de indumentaria, valuados en una suma importante para la víctima, una joven de 27 años.
En el local, la policía constató que la puerta de ingreso había sido forzada y los vidrios, completamente destruidos. Se preservó la escena y se dio intervención al personal criminalístico y al sumariante en turno.
El procedimiento fue remitido a la Comisaría 4ª, donde continúan las actuaciones para identificar al autor del hecho. Mientras tanto, la totalidad de los elementos encontrados quedó secuestrada y resguardada como evidencia.








