La reapertura de los tribunales de San Lorenzo reunió públicamente a los ministros de la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe en un momento de fuertes tensiones internas por la elección de su próximo presidente. El encuentro se desarrolló mientras el máximo tribunal atraviesa un período de indefinición, con dos reuniones fallidas para designar autoridades y posiciones enfrentadas sobre el futuro del cuerpo. Según publicó AIRE Digital, las negociaciones siguen estancadas y persiste la falta de consensos.
Las fricciones se profundizaron luego de que el gobernador Maximiliano Pullaro planteara la necesidad de que los ministros mayores de 75 años presenten un esquema de retiro. La iniciativa, enmarcada en una idea más amplia de renovación institucional, impacta directamente en varios integrantes del tribunal y reconfigura la disputa por la presidencia. Entre ellos, Rafael Gutiérrez, integrante histórico de la Corte, quien aspira nuevamente al cargo que ya ocupó en 14 oportunidades.
Una inauguración con lectura política
La refacción de los tribunales de San Lorenzo marca una mejora en la infraestructura judicial del cordón norte, pero la presencia de todos los ministros en el acto adquirió un significado adicional. Mientras públicamente se mostraron alineados en la actividad institucional, hacia adentro continúan las diferencias que impiden llegar a un acuerdo para definir quién conducirá la Corte durante el próximo período.
Fuentes consultadas por AIRE indicaron que el clima dentro del tribunal sigue siendo tenso, y que la discusión sobre la edad y los criterios de permanencia abrió un debate más profundo sobre la composición y el funcionamiento del máximo órgano judicial. Para algunos sectores, el pedido del gobernador expresa una necesidad de recambio generacional; para otros, constituye un avance político sobre la independencia del Poder Judicial.
La figura de Gutiérrez en el centro de la disputa
Rafael Gutiérrez es uno de los jueces más experimentados de la provincia y un actor clave en la estructura interna del tribunal. Su intención de volver a presidir la Corte se enfrenta ahora al reclamo del Ejecutivo para que los magistrados que superan los 75 años presenten un plan de retiro. La discusión, sin resolverse, mantiene bloqueada la designación de autoridades.
Qué se define en esta elección
La presidencia de la Corte no solo implica representación institucional: también influye en la organización interna, la gestión administrativa, la distribución de causas, la articulación con otros poderes del Estado y la definición de prioridades para todo el sistema judicial.
Por eso, la demora en la elección deja abiertas preguntas sobre el rumbo del tribunal y evidencia una fractura que, por ahora, no encuentra resolución.
Mientras tanto, el acto en San Lorenzo mostró una postal formal de unidad en un escenario donde la disputa por el control de la Corte sigue siendo el principal capítulo de la política judicial santafesina.
