Pablo Reguera, secretario general del sindicato aceitero de Puerto San Martín denunció esta mañana en declaraciones radiales que «afiliados del gremio avisaron que varias personas quisieron inscribirlos dentro de AMPIAVA», la obra social que corresponde a los trabajadores de ese espacio.
«Se trata de gente que se acerca a la casa de los afiliados y los quieren meter en nuestra obra social», dijo Reguera, que agregó: «Queremos aclarar que nosotros no hacemos eso. Ni desde el sindicato ni desde AMPIAVA no hay ofrecimiento en la calle de nuestros servicios. Ni en la calle, ni en domicilios ni en la puerta de fábricas».
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