La fiscal sanlorencina, Melisa Serena fue quien ordenó los allanamientos a los domicilios de los menores de edad que fueron identificados en el video. Vale recordar que los menores son inimputables, es decir que cualquier hallazgo producto de estas medidas judiciales habría sido nulo.
Este caso generó mucha repercusión en el barrio que se sumó a varios casos de robo que hicieron que los vecinos pierdan la paciencia. Los apuntados por estos robos son dos conocidos delincuentes de la zona que según fuentes judiciales no tendrían relación con el video musical. El caso generó mucho revuelo en el seno de la fiscalía local que ya fue el centro de atención con una manifestación de vecinos de la ciudad de Fray Luis Beltrán.
En la fiscalía de la ciudad hay fiscales que son muy expeditivos para tener los elementos probatorios que permitan dejar presos a los delincuentes que son un dolor de cabeza para los barrios de las ciudades del Cordón Industrial y hay otros que prefieren cumplir un horario de oficinista y dejar que las audiencias transcurran en liberaciones. La fiscalía general genera un informe semestral sobre la eficiencia de cada fiscal, las diferencias son abrumadoras, deberá en algún momento generar cambios y titularizar a aquellos funcionarios con mejor desempeño y no a los más amigos de la política. Una discusión eterna en un país corporativo y no de mérito.
