El reconocido restaurante de San Lorenzo fue consumido por un incendio que habría comenzado en la cocina. Participaron cinco dotaciones de bomberos y, aunque no hubo heridos, las pérdidas materiales fueron absolutas. Gracias al rápido accionar, el fuego no se propagó a los edificios linderos. Ahora se espera el informe de un ingeniero para evaluar el estado estructural del lugar
A pocos días del devastador incendio que consumió por completo el restaurante La Picaña, ubicado en la esquina de Sargento Cabral y Santo Palacios, las autoridades confirmaron que las pérdidas fueron totales. El subsecretario de Bomberos Zapadores, Iván Pino, brindó detalles del arduo operativo que demandó más de dos horas de intenso trabajo.

“La principal hipótesis indica que el fuego se originó en el sector de la cocina, aunque los peritos aún están trabajando para determinar el punto exacto”, señaló Pino. En el lugar intervinieron dos dotaciones de Bomberos Zapadores, dos de Bomberos Voluntarios de San Lorenzo y una cuba de Capitán Bermúdez. Pese a que la Municipalidad de San Lorenzo cuenta con cubas propias, se optó por utilizar los recursos de los cuarteles vecinos, que llegaron con mayor personal y equipamiento.
Gracias a los muros cortafuego de los edificios linderos y a la rápida respuesta de los bomberos, el fuego no se propagó a otras construcciones. Sin embargo, el interior del restaurante fue consumido por completo, agravado por la alta carga de fuego, debido al revestimiento de madera y la presencia de mucho vidrio.
“Ahora solo queda limpiar y esperar la evaluación de un ingeniero para determinar el estado estructural del edificio”, agregó Pino.
Afortunadamente, no se registraron heridos, pero el daño material fue total. El icónico restaurante quedó reducido a cenizas y todavía no se sabe si volverá a funcionar.