Finalmente, el grupo empresario a cargo de la cerealera Buyatti confirmó sus intenciones de cerrar su planta industrial radicada en Puerto San Martín.
Con ello los 84 operarios que prestan servicio en relación de dependencia serán despedidos.
Esto fue lo que plantearon los industriales en la reunión que se llevó a cabo hoy en sede del Ministerio de Trabajo.
Desde diciembre pasado, la planta se quedó sin producción pues hasta entonces rigió un fasón (contrato de alquiler) suscrito con Vicentín, que más allá de los problemas que atraviesa -convocatoria de acreedores y cesación de pagos- cumplió con sus obligaciones hasta el último día.
Ello le permitió a Buyatti abonar sueldos a sus empleados, no en la cantidad que marca el convenio colectivo, pero sí en buena parte, tal lo convenido con el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA) del departamento San Lorenzo, que privilegió el sostenimiento de una fuente de empleo a cambio de alguna concesión.
Caído dicho acuerdo, los portones se cerraron desde el 1º de diciembre y desde entonces volvió a reinar la incertidumbre. Hasta ahora se abonaron salarios y se mantuvo la obra social, pero desde el 1º de marzo todo cambiará.
Es que hasta el último día de febrero Buyatti debe respetar lo último acordado, esto fue, abonar sueldos hasta esa fecha. Pero en adelante, no habrá más negociación, pues el anuncio de su cierre se hizo oficial ante la cartera laboral, que liberó a las partes.
Desde el gremio se adelantó que a partir de la semana entrante llevarán adelante medidas de fuerza.
Se supone que los empleados comenzarán a recibir sus telegramas desde la semana entrante. Se supone que, al menos, deberían cobrar el total de sus indemnizaciones, aunque todo hace prever que para entonces se abrirá un nuevo proceso de discusión y reclamos.
