Editorial

Camioneros en el Futuro Energético de Argentina

Camioneros en el Futuro Energético de Argentina

Sergio Aladio
Por Sergio Aladio Secretario General del Sindicato de Camioneros de la Provincia de Santa Fe
Por Sergio Aladio Secretario General del Sindicato de Camioneros de la Provincia de Santa Fe

La energía es el motor del desarrollo de cualquier nación, y en el caso de Argentina, el sector
energético desempeña un papel estratégico fundamental en la construcción de un futuro
sostenible y próspero. Nuestra matriz energética, liderada por el gas natural (53%) y el petróleo
(32%), refleja el potencial del país para consolidarse como un actor clave en el mercado
mundial, especialmente con las crecientes oportunidades generadas por cuestiones
geopolíticas, por la producción de minerales estratégicos como el litio y por los recursos
provenientes de yacimientos de hidrocarburos no convencionales de la Cuenca Neuquina. No
obstante, este crecimiento proyectado será inviable sin el apoyo crítico de la logística terrestre,
especialmente el transporte en camiones.
Comparada con otras naciones, nuestra matriz energética muestra un equilibrio interesante
entre recursos tradicionales y renovables. Mientras que países como Canadá y Brasil recurren
mayormente a la energía hidroeléctrica, Argentina se apoya principalmente en el gas natural.
Este recurso no solo es más limpio que otros combustibles fósiles, sino que también contribuye
significativamente a la reducción de la dependencia eléctrica en los hogares y sectores
industriales. Sin embargo, nuestro consumo energético per cápita (2.900 kWh) refleja una
brecha considerable frente a países desarrollados como Canadá (16.000 kWh) y Estados
Unidos (12.500 kWh), lo que subraya la necesidad de una mayor inversión en infraestructura
y acceso.
El transporte de combustibles en Argentina combina una robusta red de ductos y una
infraestructura de transporte terrestre altamente eficiente. Los ductos, con más de 16.000
kilómetros en operación, son cruciales para llevar el gas natural desde importantes áreas de
producción, como Vaca Muerta, hasta los principales centros urbanos e industriales. Sin
embargo, el 50% de los combustibles fósiles en el país se transportan vía terrestre,
principalmente en camiones cisterna, para llegar a zonas remotas o mal conectadas donde los
ductos no alcanzan.
La flexibilidad del transporte terrestre permite garantizar el suministro continuo, incluso en
circunstancias de emergencia o en regiones con infraestructura limitada. Este modelo, aunque
más costoso y con mayor huella de carbono en comparación con los ductos, es esencial para
un país de la extensión geográfica y diversidad territorial de Argentina.
En este contexto, los camioneros argentinos cumplen una función estratégica. Desde el
transporte de crudo y productos refinados hasta la distribución de gas y combustibles en zonas
rurales, los camiones aseguran la integración energética del país. Además, contribuyen a
dinamizar las economías locales y generan empleo directo e indirecto en regiones donde otras
formas de transporte son inviables.
El sindicato que represento está comprometido con mejorar las condiciones laborales de
nuestros afiliados, promoviendo tecnologías más limpias y seguras en el transporte de
combustibles. Asimismo, abogamos por una colaboración estrecha con el gobierno y el sector
privado para invertir en infraestructura vial, mejorar la seguridad en las rutas y reducir las
emisiones asociadas al transporte.
La expansión del sector energético argentino, incluida la producción de petróleo y gas en Vaca
Muerta, así como el crecimiento de la minería de litio en el noroeste del país, requiere una
logística terrestre eficiente y confiable. Iniciativas como la reactivación del Oleoducto
Trasandino para exportar crudo hacia Chile son ejemplos positivos, pero también resaltan la
necesidad de complementar esta infraestructura con el transporte terrestre para cubrir vacíos
logísticos.
Argentina tiene el potencial de convertirse en un líder energético regional, pero para lograrlo,
debemos fortalecer la integración entre los diferentes modos de transporte y reconocer el
papel vital de los camiones en este ecosistema. La colaboración entre todos los actores del
sector será clave para asegurar un desarrollo energético que beneficie a toda la sociedad.
El sector energético argentino está en una encrucijada de oportunidades. Con recursos
abundantes, inversión, una red de transporte combinada y la determinación de nuestros
trabajadores, podemos superar los desafíos actuales y asegurar un futuro energético
sostenible. Desde el Sindicato de Camioneros, reafirmamos nuestro compromiso con esta
visión, destacando que, con los camiones, el país podrá avanzar hacia su potencial pleno en el
escenario energético global.

5