Los trabajadores del Parque Nacional Islas de Santa Fe, así como de otros Parques Nacionales del país, están en alerta ante la llegada de telegramas de despidos por parte del gobierno nacional. En Gaboto ya se registró la primera desvinculación de una empleada.
En total son 15 los puestos en riesgo de los 20 empleados con que cuenta el Parque Nacional cuya intendencia está situada en Puerto Gaboto y todos sus trabajadores son vecinos de la región, entre administrativos, técnicos y brigadistas.
Según cuenta el sitio de la región de Gaboto Info Más, no le renovaron el contrato a la trabajadora que cumplía las funciones de delegada contable. Los brigadistas de incendios seguirían hasta diciembre al menos y los técnicos y administrativos se les renovará hasta junio. No obstante, la incertidumbre es total.
Patricio Carugatti, trabajador del Parque Nacional Islas de Santa Fe comentó en Radio 2 de Rosario cómo está la situación: ” Es muy triste. Ayer nos enteramos por una lista de Whatsapp que había una compañera despedida”, indicó. Se trata de la única persona encargada del área contable, “la única que firmaba compras o pagos”.
En la provincia, son cerca de veinte trabajadores los que estuvieron durante todo enero y febrero sin contrato. En marzo firmaron por un mes, es decir que el próximo 31 de mayo. “Son días de mucha amargura, incertidumbre y tristeza porque pareciera que somos números”, lamentó Carugatti. Además, indicó: “El clima laboral es hostil porque no sabemos si mañana nos quedamos sin trabajo o no”.
Guardianes del humedal
Nadie en su sano juicio podría pensar que una de las reservas de agua dulce y biodiversidad más importantes del mundo deje de tener guardianes que la protejan y alerten de posibles amenazas. De concretarse el desmantelamiento virtual del Parque Nacional de las islas de Santa Fe la protección del humedal y su diversidad quedan sin capacidad operativa de control, el parque tiene más de 8 mil hectáreas.
Estos trabajadores están muy lejos de ser una casta burocrática que se enriquece a costa del estado, muy por el contrario fueron actores claves en la coordinación cuando producto de la extrema sequía el humedal ardió por meses. Los despidos masivos son siempre injustos y mucho más si son de trabajadores que protegen el bien más preciado de la humanidad que es la naturaleza en estado puro.
