La localidad de Roldán se vio interrumpida por un incidente impactante cuando un conductor de un Gold Trend perdió el control, chocó contra el cantero de una casa en Libertad al 100 bis y terminó dentro de una zanja. Sin embargo, lo que más sorprendió a las autoridades fue el estado de ebriedad del conductor, que resultó ser tan extremo que el dispositivo utilizado para realizar el test de alcoholemia no pudo medir con precisión su nivel de alcohol en sangre.
El incidente ocurrió alrededor de las tres y media de la tarde, una hora inusual para encontrarse en estado de embriaguez. Personal de la Guardia Urbana (GUR) fue el encargado de realizar la revisión del conductor, quien se mostraba visiblemente alterado. Según informes policiales, el hombre, de 45 años y residente en Roldán, es un conductor profesional, lo que agrava aún más la gravedad de la situación, aunque en este caso se encontraba manejando su vehículo particular.
A pesar de la evidente necesidad de atención médica debido al accidente, el conductor se negó obstinadamente a recibirla y fue retirado del lugar por un familiar, dejando a su paso un rastro de confusión y consternación entre los testigos en el lugar.