Un grupo numeroso de moteros se reunieron en un camino rural en Puerto Gaboto ayer a la tardecita para llevar a cabo picadas ilegales. Cuando la policía arribó al lugar, los presentes comenzaron a huir, incluso uno se cayó de la moto y, en la desesperación, la dejó abandonada en el sendero.
Horas más tarde, la dueña de la moto, una mujer de 44 años, se dirigió a la comisaría de Gaboto en busca del rodado y declaró que sus hijos la habían abandonado en el camino. Se trataba de una CG titán, 150 cc, de color azul, que tenía roturas en su cadena.
La convocatoria a la picada se había realizado por las redes sociales y el encuentro se produjo en las inmediaciones del canal de desagüe que une Puerto Gaboto con Maciel.
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