Una publicación que apareció este martes en redes sociales de la sindicada «entregadora» en el crimen de Gustavo Gutiérrez puso en alerta y generó un enérgico repudio en los medios de comunicación y en la comunidad toda de San Lorenzo y la región.
En un posteo realizado en su cuenta de Facebook, la coimputada Andrea Belén Mimbrero (34 años) solicita “pronta libertad para mí y mis compañeras”, mientras cumple la medida cautelar de prisión preventiva efectiva sin plazo al igual que su pareja Diego Jesús Pérez (24), a quien la investigación lo ubica como el autor de los disparos que le quitaron la vida a Gustavo Gutiérrez en ocasión del robo de su auto.
A poco más de dos meses del crimen del «Negro» Gutiérrez, la publicación realizada por Mimbrero no hace más que exponer la facilidad con las que las personas detenidas pueden vulnerar el sistema penitenciario provincial, para así acceder a un teléfono celular y comunicarse con el exterior desde sus lugares de alojamiento.
Una publicación que obviamente un llamado de atención para el sistema judicial, que corre serios riesgos de entorpecimiento de la investigación en tanto y en cuanto los dos imputados en la causa puedan comunicarse con el exterior con total impunidad. O en el peor de los casos, seguir cometiendo delitos desde la cárcel.
Nunca está demás recordarle a la comunidad toda que Andrea Belén Mimbrero y Diego Jesús Pérez afrontan una pena en expectativa de prisión perpetua, tras la imputación del fiscal Juan Carlos Alberto Ledesma por el delito de homicidio criminis causa. Es decir, ambos procuraron darle muerte a Gustavo Gutiérrez para garantizar la impunidad del robo de su auto.
Por respeto a su memoria, los trabajadores de prensa que compartimos años de trabajo con Gustavo Gutiérrez exigimos tanto al Ministerio Público de la Acusación como al Servicio Penitenciario de la provincia de Santa Fe que arbitren las medidas necesarias para realizar un estricto control en las condiciones de detención de Mimbrero y Pérez, incluyendo la prohibición de acceso a aparatos telefónicos, mientras se lleva adelante la investigación.