La Prefectura Naval Argentina (PNA) cambió formalmente de era. El Gobierno nacional aprobó el Decreto 457/2025, publicado en el Boletín Oficial, que modifica artículos clave de la Ley 18.398 sancionada hace más de 50 años, redefiniendo la esencia, funciones, estructura de mando y jurisdicciones de la fuerza que custodia mares, ríos, puertos y costas del país.
De fuerza auxiliar a Fuerza de Seguridad Federal
Uno de los ejes más significativos de la reforma es el cambio de definición institucional. Desde ahora, la Prefectura Naval es considerada oficialmente una Fuerza de Seguridad Federal, diferenciada de las Fuerzas Armadas y equiparada en términos de su rol con Gendarmería Nacional, Policía Federal y PSA.
Este cambio no es solo semántico. Reposiciona a la PNA en la arquitectura de la seguridad nacional, consolidando sus funciones como primera línea de defensa contra delitos federales en ríos, costas y mares: narcotráfico, contrabando, trata de personas, terrorismo y pesca ilegal.
Nueva dependencia del Ministerio de Seguridad
Otro cambio sustancial está en su dependencia orgánica. La reforma elimina la mención de la Armada Argentina como órgano de conducción, estableciendo que la Prefectura depende formalmente del Ministerio de Seguridad de la Nación. Este ajuste legal refleja un esquema operativo que ya se practicaba de hecho y clarifica responsabilidades políticas y administrativas.
La PNA deja atrás así su concepción histórica como auxiliar de la Armada, reforzando su perfil policial, de patrullaje y control civil con capacidades de inteligencia y reacción inmediata.
Funciones actualizadas y la clave pesquera
La ley reorganiza y moderniza las funciones de la Prefectura. Entre las modificaciones más relevantes están:
🔹 Incorporación explícita de la función de Policía Auxiliar Pesquera, en línea con el Régimen Federal de Pesca (Ley 24.922). Con este cambio, la PNA refuerza su rol en el control de buques nacionales y extranjeros que operan en aguas jurisdiccionales, una herramienta central en la defensa de los recursos marítimos argentinos.
🔹 Designación como autoridad de aplicación del Sistema Guardacostas, que integra radares, sensores, sistemas satelitales y comunicaciones unificadas para vigilancia y respuesta en tiempo real. Si bien ya operaba de facto, ahora adquiere jerarquía normativa como herramienta estratégica del Estado.
🔹 Posibilidad de participar en Misiones Internacionales por decisión del Poder Ejecutivo. La Prefectura podrá integrar operativos multilaterales de seguridad, control marítimo y asistencia humanitaria en la región o a nivel global, proyectando su presencia más allá de las aguas argentinas.
🔹 Facultad de proponer normas sobre faltas y contravenciones en su jurisdicción específica, una función que fortalece su capacidad regulatoria.
🔹 Reducción de la injerencia directa sobre empresas de salvamento, limitándola a la supervisión técnica y control de seguridad, en línea con la tendencia global de desburocratizar actividades privadas reguladas.
Requisitos y conducción interna
La reforma establece que solo podrán ser designados Prefecto Nacional o Subprefecto Nacional quienes pertenezcan al Cuerpo General y Escalafón General de la fuerza. Esto garantiza un modelo de conducción basado en la carrera interna, mérito profesional y experiencia operativa, eliminando interpretaciones previas que podían habilitar nombramientos externos o de escalafones no operativos.
El artículo 11 centraliza en el Prefecto Nacional la organización, administración, justicia, gobierno y disciplina de la PNA, bajo control superior del Ministerio de Seguridad. Esto consolida un esquema de mando unificado y refuerza la autoridad interna en decisiones estratégicas, operativas y de recursos humanos.
Cambios en disciplina y carrera del personal
La ley detalla y clarifica la estructura de autoridad interna, definiendo el orden de superioridad por cargo, jerarquía, situación de revista y antigüedad, eliminando ambigüedades que generaban interpretaciones conflictivas.
Entre los cambios más destacados se incluyen:
- Cumplimiento obligatorio de asignaciones, funciones y cambios de destino para todo el personal, reforzando el carácter de servicio federal y disponibilidad operativa.
- Extensión al personal subalterno de la situación de disponibilidad, hasta ahora reservada al personal superior.
- Política anual de ascensos y eliminaciones: el Prefecto Nacional podrá definirla cada año, ejerciendo un control pleno sobre las carreras y transiciones de su personal.
- Eliminación del requisito de no estar bajo sumario o sanción para solicitar baja voluntaria, adecuándose al principio de voluntariedad en la relación de empleo público y evitando retenciones forzadas.
- Facultad para reincorporar temporalmente a personal retirado, asegurando disponibilidad de recursos humanos con experiencia ante emergencias o necesidades operativas específicas.
Marco del personal civil y régimen laboral
La norma también actualiza el marco legal para el personal civil de la Prefectura, estableciendo su sujeción a la Ley Marco de Regulación de Empleo Público Nacional (25.164) y convenios colectivos aplicables, equiparándolo con el resto de la administración pública nacional en derechos, obligaciones y escalafón.
Funciones eliminadas: el fin de atribuciones obsoletas
El decreto deroga funciones que habían quedado desactualizadas:
- Otorgamiento de privilegios postales: carecía de sentido operativo y no se aplicaba desde hace décadas.
- Juzgamiento de faltas o contravenciones policiales de seguridad pública: tarea que corresponde actualmente a los órganos judiciales.
- Llevar prontuarios de antecedentes: función ya absorbida por registros judiciales y sistemas federales unificados.
Además, se eliminan los artículos 87, 88, 89, 93, 94, 95, 96 y 97, junto a Anexos III y IV de la Ley 18.398, por considerarse de objeto cumplido o para simplificar el texto normativo.
Un rediseño con visión estratégica
En diálogo con SL24, especialistas en derecho marítimo y seguridad portuaria coinciden en que la reforma consolida el perfil real de Prefectura como fuerza policial federal fluvial, marítima y portuaria, que actúa como primera línea frente al narcotráfico, contrabando, terrorismo, pesca ilegal y delitos ambientales en las aguas argentinas.
El fortalecimiento de su rol como Policía Auxiliar Pesquera adquiere especial relevancia ante el crecimiento de flotas extranjeras que operan en el límite de la ZEE (Zona Económica Exclusiva) y las denuncias de pesca ilegal que afectan la soberanía y economía argentina.
También la consolidación como autoridad del Sistema Guardacostas permite integrar tecnología y mando en tiempo real para vigilancia y respuesta, clave en la Hidrovía Paraná-Paraguay y el Atlántico Sur.
Impacto en la región y los puertos santafesinos
Para Santa Fe y la región Up River, la reforma implica un cambio sustancial en la cadena de control. Prefectura es la autoridad de seguridad y navegación en los puertos del Cordón Industrial, por donde sale el 80% de las exportaciones argentinas. Su fortalecimiento como Fuerza de Seguridad Federal refuerza la respuesta ante delitos complejos como el narcotráfico portuario, la corrupción operativa y los atentados vinculados a organizaciones criminales.