En una acción coordinada entre el Gobierno provincial, la Policía de Investigaciones, la Municipalidad de Rosario y el Ministerio Público de la Acusación, se llevó a cabo un operativo este martes que resultó en la clausura de cuatro desarmaderos en la ciudad de Rosario. Además, se logró el secuestro de una tonelada de material no ferroso.
Los procedimientos, ordenados por el fiscal del Ministerio Público de la Acusación, César Pierantoni, se desarrollaron en las zonas sur y oeste de la ciudad, específicamente en las ubicaciones de España al 6400; Arequito y Pago de los Arroyos; Presidente Quintana al 2200 y 27 de Febrero al 6500.
Entre el material secuestrado se encontraron elementos pertenecientes a Aguas Santafesinas, la EPE, placas de cementerio, crucifijos, medidores de gas y alumbrado público, entre otros artículos.
El secretario de Registros Provinciales, Matías Figueroa Escauriza, destacó la importancia de este tipo de operativos, señalando que están dirigidos a controlar los comercios dedicados a la compra y venta de material no ferroso, con el fin de seguir el rastro de quienes se dedican a comercializar productos robados, como cables de luz, medidores de gas y otros elementos.
Es relevante mencionar que estos allanamientos se llevaron a cabo gracias a investigaciones previas, muchas de las cuales fueron iniciadas a partir de denuncias de los propios vecinos, quienes pueden reportar actividades sospechosas a través del correo electrónico desarmaderos@santafe,gov.ar.
El secretario Figueroa Escauriza subrayó el compromiso continuo del Gobierno provincial en este tipo de acciones, informando que desde el inicio de la gestión se han realizado más de 12 allanamientos e inspecciones en comercios similares en Rosario, y más de 30 en todo el territorio provincial. La mayoría de estos procedimientos se llevan a cabo en colaboración con las autoridades locales para verificar la habilitación de los establecimientos.
La secretaría de Gestión de Registros, a través de la Dirección Provincial de Desarmaderos (Re.De.), trabaja en estrecha colaboración con los municipios y comunas con el objetivo de prevenir la sustracción de automotores, autopartes y materiales no ferrosos. Entre los objetivos de estos acuerdos se encuentra el intercambio de información para garantizar que las actividades de compra y venta de repuestos automotores usados estén debidamente habilitadas por las autoridades municipales.
