Un hombre de 45 años murió ayer a última hora de la tarde tras incrustar su auto contra uno de los paredones del cementerio de Arroyo Seco.
La víctima fue identificada como Roberto Q.
Conducía un Ford Fairlane y falleció en el acto.
Se investigan las razones del siniestro para determinar si el hombre tomó una decisión de estrellarse o bien fue consecuencia de alguna descompensación quedando el rodado sin control alguno.-
Actúa la Fiscalía de Rosario.
Comentarios