Drama de una sanlorencina en la India

Alquilaron un vientre en la India, nació su hija y ahora no les permiten volver a su lugar de residencia porque su hija es apátrida.


Elsa Saint Girons, una abogada argentina, oriunda de la ciudad de San Lorenzo en la provincia de Santa Fe, contrajo matrimonio con Juan Antonio González González, español nacido en Madrid, lugar donde residen actualmente. Ante la imposibilidad de tener hijos deciden alquilar un vientre en La India a través de un contrato de maternidad subrogada firmado por ambos en al año 2011.

El pasado 16 de mayo en la ciudad de Nueva Delhi, nació Cayetana, y tal cual lo establecen las leyes de ese país en su partida de nacimiento figura como madre la doctora Saint Girons. Pero para el Estado indio, Cayetana no es India por ser hija de padres extranjeros. Allí fue donde comenzó el calvario de Elsa, Juan y la bebé.

“Llevamos toda la documentación a la embajada española para que inscribieran a la niña y nos denegaron la inscripción, alegando que no puedo figurar yo como madre porque existe una madre subrogada, y yo no fui quien verdaderamente la tuvo” sostuvo Saint Girons y agregó: “Obviamente llevamos el contrato de subrogación, la renuncia de la subrogada e inclusive Juan, mi esposo, fue con ella, para que verificara las actuaciones. Yo no quería aparecer como madre, porque sabía que tenía que adoptarla, pero la clínica donde nació mi hija hizo la partida sin consultarlo con nosotros, y lo hizo de acuerdo a las leyes indias”, aseguró.

Posteriormente se les solicitó que intentaran modificar la partida de nacimiento pero desde La India se negaron porque va a en contra de su legislación.

“Intente inscribirla ante la embajada Argentina, pero también me denegaron la inscripción, lo cual es normal porque yo no tengo actualmente residencia en nuestro país”, reconoció la abogada Argentina y continuó, “ayer, en un estado de locura, me fui a la embajada española, suplicándoles que me ayudaran, que me dejaran volver a España, y su contestación fue: Usted sabe que en España está prohibido, pero que me quedara tranquila que alguna solución podía haber. Lo cierto es que hoy la Cónsul, nuevamente nos dijo que no iba a inscribir la nena, dejándonos entrever que si queríamos volver a España tendríamos que abandonar a la niña aquí en La India”.

Otro de los intentos desesperados que llevaron adelante Elsa y Juan fue presentar en la embajada Argentina, un escrito para provocar la denegación por escrito y de esa forma poder interponer un recurso de amparo, en tanto Juan hizo lo propio en la embajada española, con fundamento jurídico español.

Lo cierto de esta cuestión es que Cayetana no es India, ni española, ni argentina, es “apátrida” porque hasta el momento y tras realizar todos los trámites pertinentes posibles, sus padres no lograron que tenga un documento de identidad por lo cual no pueden abandonar La India y volver con su hija a Madrid, su actual lugar de residencia. “No hay nadie o mejor dicho ningún Estado, que la proteja en este momento”, afirmó Saint Girons.

En la misiva fechada el 18 de junio último y dirigida a la embajada de nuestro país, la Dra. Saint Girons, solicita la inscripción como ARGENTINA de su hija, CAYETANA ELSA GONZALEZ SAINT GIRONS, basados en los fundamentos jurídicos y normas nacionales e internacionales.

Textualmente, en el segundo párrafo titulado Constitución Nacional, la letrada y madre de Cayetana sostiene: Que de acuerdo a lo establecido por el art. 16 de la Constitución Argentina: “Todos sus habitantes son iguales ante la ley”

Negar la inscripción de Cayetana, implica un avasallamiento de sus derechos y la total desprotección de la niña.

Que como es público y notorio existen casos en argentina de maternidad subrogada.

Permitir que por ser hijo de un famoso, y/o de homosexuales y/o por haber nacido en Estados Unidos, puedan ser inscriptos como argentinos, e impedir que lo sea nuestra hija, es a todas luces un acto discriminatorio, que se agrava por el hecho de que en la actualidad ninguno de los países le otorga nacionalidad a nuestra hija.

Caemos en la hipocresía de no querer ver que en Argentina, existen casos de subrogación.

Basta con poner en un buscador de internet el titulo “maternidad subrogada” para que salgan infinidad de gente que ofrece su vientre, y gente que solicita vientres de alquiler. Y entonces. ¿Por qué negarle a Cayetana su nacionalidad?

En el extenso texto, la abogada sanlorencina refiere a lo que tiene que ver con la nacionalidad y cita al Artículo 15 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948; al Artículo 19 de la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre de 1948: al Artículo 24 (3) del Pacto Internacional de derechos Civiles y Políticos (PIDCP) de 1966; al Artículo 20 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos (Pacto de San José) de 1969 y al Artículo 7 de la Convención sobre los Derechos del niño (CDN), entre otros. Y sostiene que, “si la embajada argentina, y la embajada española niegan la nacionalidad a mi hija, si para el estado indio mi hija no ostenta su nacionalidad por no ser hija de padres indios, la consecuencia irremediable es que CAYETANA sea apátrida “

Según Saint Girons, “la manera de impedir que una persona caiga en la calificación de apátrida, es asegurarle al momento de su nacimiento la nacionalidad como lo disponen el Art.24 del PIDCP (1966), el Art.1 de la Convención de 1961 para Reducir los Casos de Apatridia y el Art.7 de la CDN. En nuestra normativa, se otorga la nacionalidad argentina a las personas que nacen en el territorio argentino -ius solis- o por vínculos de sangre -ius sanguinis- o por naturalización. Tal como surge de la Ley de Nacionalidad y Ciudadanía Nº 346 de 1863,modificada por las leyes Nº 16.569 de 1968, Nº 20.957 de 1975 y Nº 23.059 de 1984 y sus Decretos Reglamentarios, se distingue entre los Argentinos por Origen y Naturalización.

En el caso de nuestra niña, ella es ARGENTINA por aplicación expresa del “ius sanguini”. Es hija de una ciudadana ARGENTINA”, fundamentó la letrada.

Ahora lo que espera Elsa, Juan y Cayetana, es una pronta respuesta de parte de las embajadas de Argentina y España o de alguna de las dos. “Estamos desesperados, necesitamos que alguien nos escuche para poder darle una identidad a nuestra hija. Hace tres meses que estamos aquí y si continuamos en este país vamos a perder absolutamente todo, nuestro trabajo, nuestro hogar. Pero lo peor es que están llevando a que la nena no pueda criarse en su hogar, con su familia, con sus amigos”, suplicó Elsa.

“Es muy grave nuestra situación”, finalizó.

Fuente: Alejandro Perea

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