La situación crítica que padece Aguas Santafesinas S.A. llevó al gobierno de Maximiliano Pullaro a tomar una medida importante como es declarar la emergencia de la empresa por su actual estado financiero con un déficit millonario proyectado para el actual 2024. Como lo expresó el propio Ministro de Obras Públicas, Lisandro Enrico, en una entrevista realizada ayer con CNN Radio Rosario al afirmar que se trataba del “monumento a la mala administración en Santa Fe”.
El pedido ingresó en las últimas horas a la legislatura provincial por parte del Poder Ejecutivo con la intención de generar un debate profundo sobre la compañía y su funcionamiento. Además de su planta de personal y la figura legal de la misma como sociedad anónima. También figura la falta de inversión y cómo seguir brindando el vital servicio de agua potable en medio de un complicado contexto.
Al hacerse cargo la actual gestión, se modificó el sistema tarifario con importantes aumentos para tratar de reducir el rojo diario, también ordenar lo referente a los grandes acueductos y cobrar un valor acorde al momento de vender el producto a comunas y municipios. Con seis meses de trabajo, el panorama continúa siendo complejo, más allá de los recortes efectuados y de una serie de reordenamientos internos para un mejor funcionamiento.
Por eso la solicitud del estado de emergencia proyectada es hasta el 31 de diciembre con la opción de una prórroga por otros 12 meses. Ya que el objetivo es contar con facultades para determinar la tarifa, precios y cargos, junto a la generación de un nuevo marco regulatorio dentro del período establecido y así buscar una solución que estabilice la actual condición de ASSA.