“Pullaro reclama, reclama, reclama… Pues él es así”, expresó Francos con tono distendido, aunque sin restarle legitimidad a los pedidos del mandatario provincial. “Pide lo que corresponde: las rutas, prácticamente”, agregó el funcionario, aludiendo al mal estado de corredores clave como la autopista Rosario–Buenos Aires.
Francos reconoció que Santa Fe es una de las provincias más insistentes en la mesa del federalismo y explicó que, aunque el Gobierno Nacional está al tanto de las necesidades, existen limitaciones presupuestarias y demoras administrativas, como el traspaso de concesiones por peajes, que impiden una respuesta inmediata. “Aunque sea, que se tapen los baches”, sintetizó.
Otro punto central del reclamo santafesino es la deuda previsional. Según detalló Francos, Pullaro exige una solución estructural para la Caja de Jubilaciones de la provincia, un conflicto de larga data que incluso fue judicializado y cuya resolución implicaría un desembolso superior a los mil millones de dólares. “Quiere que solucionemos un tema que ha pasado por todos los gobiernos, y que lo resolvamos ahora, en este”, señaló.
En contexto electoral, el jefe de Gabinete deslizó que la intensidad de los planteos podría tener también una lectura política: “Casualmente los reclamos de los gobernadores vienen en esta etapa”.
Pese a las diferencias, Francos destacó su buena relación personal con Pullaro y con la vicegobernadora Gisela Scaglia.
