Algo se está cocinando en los restaurantes de Christian y Roberto Petersen y tiene muy mal sabor.
Se trata de una deuda que los hermanos habrían acumulado desde 2019 con sus proveedores de mariscos y pescados para sus restaurantes y servicios de catering.
Según un pool de empresas, ambos, junto a su otro hermano Lucas y su madre, son dueños de restaurantes en San Isidro, además del Restaurant Terrazas de la Rural y el Club Náutico San Isidro, tienen una larguísima lista de cuentas impagas en concepto de alimentos.
La enorme deuda, que asciende a los seis millones de pesos, viene de una infinidad de facturas que deben desde finales de 2019 y que luego, con motivo de la pandemia, quedaron en el limbo.
Los proveedores de los empresarios gastronómicos habrían decidido empezar a dejarlos expuestos a través de “escraches” en los medios, en las sedes de sus restaurantes e, incluso, en la puerta del canal 13 donde uno de los Petersen participa de un programa culinario.