Los retenes se establecieron por San Juan a lo largo de República de Chile, Carrizo y Vergara; y por bulevar Urquiza a la misma altura.
En este marco, se remitieron al corralón 12 motocicletas y 7 automóviles. Los efectivos de Gendarmería identificaron a transeúntes para comprobar si existía alguien con pedido de captura.
La presencia de la fuerza nacional en San Lorenzo obedeció a un pedido directo del intendente Leonardo Raimundo al jefe zonal de Gendarmería durante una reunión que se realizó el último jueves en el palacio municipal.
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