A la hora de cocinar, siempre entran en juego diferentes técnicas y recetas. Y, por supuesto, que los asados a leña no son la excepción a la regla. Si bien, existen múltiples formas para realizarlos, siempre es importante tener en cuenta la madera que se utiliza, el tamaño de los pedazos, la carne que se asará y el tiempo de cocción.
Además, dentro de los asados a leña, de acuerdo al tipo de carne dependerá el tiempo que esté en la parrilla. Los chorizos, por ejemplo, llevan más minutos de cocción que la entraña. Y es que la diferencia radica en el tamaño de los cortes.
Cómo lograr el mejor asado a leña
Para preparar el mejor asado a leña hay que comprar una madera específica. En este caso, el quebracho blanco es una de las mejores leñas para asado, debido a que no tiene tanto sabor como la madera de un manzano o un frutal. Eso permite que, al colocar cualquier tipo de carne, como un chorizo, no quede ahumado por el olor del humo que desprende la madera al quemarse.
Además, el quebracho blanco proveniente en su mayoría de Santiago del Estero tiene una braza que prende fácil y genera una llama en poco tiempo. Estas características lo diferencian del quebracho colorado que es más pesado, pero tiene la ventaja de contener más poder calorífico. Igualmente, para lograr un buen asado a leña es importante contar con las mejores carnes para tu heladera, como son los embutidos.
Fuente: Pixabay
En cuanto a la cocción de la carne, la entraña se cocina en aproximadamente en 15 minutos, el chorizo tarda alrededor de 40 minutos, la tira de asado un poco más de una hora y los embutidos y los pollos pueden cocinarse en el mismo lapso de tiempo dependiendo de los cortes realizados.
Paso a paso: cómo hacer un asado
Paso 1: prender el fuego. La leña tiene que estar seca cuando se utilice. En la misma línea, debe ser guardada en un lugar que no esté en contacto con la humedad para evitar que se humedezca. Esto se debe a que, la madera húmeda, tarda mucho más tiempo en prenderse fuego.
Paso 2: tirar la carne. Hay que prender el fuego entre 10 y 20 minutos antes de colocar la carne. Primero se tiene que calentar la parrilla y luego se coloca el chorizo, los embutidos, los pollos o el corte que se cocinará. También se puede agregar sal gruesa y condimentos a fin de sazonar los alimentos.
Igualmente, para asar la carne es necesario que la madera esté un poco consumida y se vean las brasas. El fuego no tiene que estar tan fuerte porque puede liberar más humo provocando que la carne quede cubierta y se genere un ahumado distinto. Además, cuanto más calor, se arrebata más la carne.
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Paso 3: sumar leña. A medida que se consume la leña, es preciso agregar más pedazos de madera para evitar que se apague de todo el fuego o se pierda el calor.
Paso 4: dar vuelta la carne. Una vez que se cocinó una parte del corte que se colocó en la parrilla, hay que cambiarlo de posición para que se cocine por completo.
Paso 5: retirar. Por último, se retira el corte de carne dependiendo del tiempo de cocción de cada pedazo y se sirve.
Diferencias entre la leña y el carbón
El carbón proviene de la misma madera que la leña, pero pasó por un proceso calórico que lo transformó en el material embolsado. Al ser derivado de la madera, tiene un origen vegetal. Sin embargo, la principal diferencia entre ambos se encuentra en que el carbón es más sencillo de usar y el fuego prende más rápido.
Aunque, cabe mencionar que la leña es más limpia en comparación con el carbón que ensucia mucho más. Otra gran diferencia se encuentra en el precio, la leña es más barata incluso es posible de conseguir de forma personal.
Pero, en ambos casos, los pedazos que estarán sometidos al fuego deben ser gruesos ya que tardan más tiempo en consumirse y que se vuelvan brasa.
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