Clickseguros da algunas características más acerca de este tipo de póliza que ofrece entre sus numerosos productos y servicios.
El principal objetivo de un seguro de caución es resarcir a la parte perjudicada en un contrato, en caso de que no se cumpla lo pactado. Aunque no es obligatorio contratarlo, sí lo es si el contrato firmado entre las partes involucradas así lo establece.
A nivel estatal, incluso se emplea este tipo de póliza para respaldar contratos de construcción o infraestructura como por ejemplo: carreteras, puentes y otras vías de comunicación. También en la construcción de edificios habitacionales o comerciales.
De esta manera, flexibiliza los procedimientos para llevar a cabo la contratación de proveedores. Por otro lado, promueve la supervisión en el avance de obligaciones aumentando la probabilidad de culminación del proyecto.
Otro destino de los seguros de caución son los alquileres de viviendas. Este instrumento facilita la contratación del alquiler, evitando pérdidas financieras a los propietarios y demoras a futuros inquilinos. De esta forma optimiza toda la operatoria, desde la velocidad para cerrar el trato e incluso el hipotético desalojo por falta de pago.
Las compañías aseguradoras ofrecen un respaldo seguro, confiable en estas operaciones, a partir de un análisis riguroso de las partes intervinientes. Además, brindan soluciones rápidas y efectivas ante el incumplimiento en los pagos.
Generalmente, las aseguradoras se hacen cargo de los alquileres o pagos no realizados, retenciones indebidas y un porcentaje del valor mensual en concepto de expensas y gastos.
Con el avance de la tecnología y del mundo digital, actualmente existe la posibilidad de contratar un seguro de caución desde la comodidad del hogar y de manera muy simple.
Por supuesto, cada compañía aseguradora estipula sus propios requisitos al momento de contratar un seguro de caución. Sin embargo, en líneas generales lo que suelen requerir es:
- La información completa referida a las obligaciones a garantizar (contrato, pliego, orden de compra, etc).
- La información económica y financiera del tomador/a de la garantía (informe económico comercial, balance, antecedentes laborales, entre otros).
- Contrato social, estatuto, CUIT o CUIL.
Hay distintos tipos de caución, como se mencionó anteriormente, garantía de obras y suministros y/o servicios públicos o privados, garantías aduaneras, judiciales, impositivas, actividad y profesión, alquiler, concesiones.
Por otro lado, la vigencia de este tipo de seguro rige hasta la extinción de las obligaciones a cargo del tomador garantizadas por la póliza emitida. Su cancelación se realiza a través de la presentación de documentación respaldatoria que acredite la finalización de las obligaciones a cargo del tomador o a través de la devolución de la misma.
Para contratar un seguro de caución solo se necesita contactarse con el productor y presentar la documentación necesaria para el análisis del caso. Se denomina “tomador/a” a quien contrata la póliza para prestar garantía de sus obligaciones a un “beneficiario/a”.
