Los partidos políticos con representación en la Cámara de Diputados de la Provincia llegaron a un acuerdo para posponer hasta la semana próxima la sesión preparatoria que debe definir las nuevas autoridades del cuerpo.
De ese modo, evitaron que el gobernador Omar Perotti inaugure el sábado un nuevo período ordinario en la Legislatura inmerso en una situación institucional inédita en Santa Fe y no es otra que Diputados tenga sus cargos acéfalos.
Las frenéticas negociaciones fueron detonadas por la internación del actual presidente, Miguel Lifschitz, por un cuadro de Covid-19.
Las opciones barajadas en los últimos días pendularon entre una prórroga del mandato de la actual mesa de conducción, a abrir un compás de espera hasta mayo para concretar la sesión preparatoria que debió realizarse el lunes pasado y fue postergada por tales circunstancias.
En base al acuerdo, la vicepresidenta primera de la Cámara baja, la peronista Lucila De Ponti, y la vice segunda, la radical frentista Jimena Senn, representarán a la conducción del cuerpo en la Asamblea Legislativa del sábado.
“Terminó primando lo humano por sobre lo institucional”, deslizó una fuente parlamentaria del Frente Progresista (FPCyS), espacio político sacudido por el agravamiento de la salud de Lifschitz.
Fuente: La Capital
