Un joven asaltante intentó robar en enero pasado a un hombre, quien estaba con sus dos hijos, en la cuadra de Nicaragua al 1100, de barrio Empalme Graneros., en Rosario.
Un uniformado que estaba de civil, justo se encontraba en un comercio y advirtió el delito e intervino. El ladrón estaba con un acompañante que lo esperaba en una moto y trató de escapar, pero llegó hasta un pasillo de Barra al 1200 bis y disparó contra el empleado policial que lo seguía en su auto.
El proyectil impactó en el coche y, según la imputación del fiscal, el uniformado respondió con otro disparo que le pegó al sospechoso en los testículos.
Esta semana, en una audiencia de procedimiento abreviado, el asaltante, de 20 años, fue condenado a seis años y ocho meses por robo calificado, portación de arma, daño y resistencia a la autoridad.
De acuerdo con la acusación de la fiscal Andrea Vega, el 17 de enero pasado a las 18.30, el acusado, identificado como Gastón Monzón, iba con un acompañante en una moto y al llegar a Nicaragua al 1100 sacó un arma de fuego y apuntó contra tres personas que estaban en la vía pública.
Las víctimas eran un hombre y dos menores. Hubo un forcejeo y el asaltante dirigió el arma hacia a la cabeza de uno de los hijos de la víctima mientras le reclamaba que entregara todo lo que tenía encima.
Tras ello, intervino el policía y desbarató el atraco.
Fuente: El Ciudadano
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