Las Pymes y el desafío de otra termoeléctrica

El inicio de la construcción de la segunda central termoeléctrica en Timbúes alienta a que las constructoras de la región tengan expectativas ciertas de acceder a los pliegos licitatorios y apostar por tales adjudicaciones.


Tal posibilidad asoma como cierta teniendo presente el anuncio formulado oportunamente por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, admitiendo tal posibilidad, y ratificado ahora por Daniel Cameron, titular de la Secretaría de Energía de la Nación.

“La posibilidad es cierta, Cameron ratificó la voluntad de la presidenta para la contratación de Pymes de la región, siempre que tengan el nivel de profesionalismo exigido”, expresó Néstor Sánchez, presidente comunal de Timbúes, quien anteayer se reunió con el funcionario nacional para conocer en detalles el proyecto.

“Todo está en marcha, los pliegos licitatorios y pronto las adjudicaciones. la fecha tope para el inicio de su construcción es el 30 de diciembre próximo”, aseguró Sánchez.

Contemplando tal decisión política, es fácil prever que más de una Pyme de la región podrá ser contratada por el consorcio que tiene a su cargo la puesta en marcha de la termoeléctrica, e integrado por las firmas General Electric, Duro Felgueras, y Fainser, esta última, con la particularidad de ser una Pyme nacional y que por su intermedio y por primera vez una mediana empresa accede a este tipo de emprendimientos de gran envergadura.

La seguridad con la que las empresas locales serán contratadas está respaldado por el nivel de profesionalismo alcanzado en sus estructuras, incluyendo recursos humanos y equipamiento técnico.

Como muestra, vale citar el caso del Grupo Brayco, que durante la construcción de la primera termoeléctrica (General San Martín) participó de esa licitación resultando adjudicada para llevar una importante parte de la obra de ingeniería civil, superando en la ocasión a firmas porteñas y hasta extranjeras.

Los servicios aportados por esta Pyme sanlorencina fueron muy valorados. Por entonces se contrató alrededor de 600 personas (el total para todo el complejo fueron 2 mil) y a un promedio de 5 mil pesos de salario (actualizado al presente), lo que evidencia el volumen de dinero aportado al circuito económico de la región.

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