Le dicen Morocho y se escondía en un búnker de Buenos Aires al 600 de Capitán Bermúdez, cuando lo atrapó la Policía el 6 de diciembre de 2018, no sin antes golpear a los efectivos con el propósito de darse a la fuga.
Este martes comenzó el juicio oral a Claudio Morocho M. de 38 años, a quien la fiscal Marisol Fabbro pidió la pena de 25 años de cárcel por un doble crimen perpetrado en Lima y Cerrito de la ciudad de Rosario.
En esa misma vivienda en donde detuvieron al Morocho, en enero pasado ingresaron al grito de “Policía, policía” para sorprender a quienes estaban en la casa: Jesica González, de 37 años, junto a su hijo de 15 y su nuera de 16, embarazada de 8 meses. En el lugar se levantaron 40 balas calibre 9 milímetros y dos municiones de escopeta calibre 12 mm.
Jesica cumple prisión domiciliaria en esa casa de Buenos Aires al 600. La misma que en agosto de 2019 fue detenida Ramona A., alias “La Gringa”, investigada por un ataque a tiros contra las visitas de la Unidad Penitenciaria Nº 11, de Piñero, en el que dos personas resultaron heridas.
La Fiscalía le atribuyó dos hechos al Morocho: el 23 de septiembre del 2018 a las 23.15 en calles Lima y Cerrito de Rosario, portaba un arma de fuego y esperaba a las víctimas Kevin Nieri de 16 años y Leonel Bubacar de 18 años, mientras un menor de edad e imputado por el Juzgado de Menores, llevaba a los adolescentes a la casa del acusado con la excusa de hablar con ellos.
Al llegar al lugar el menor que acompañaba a Morocho efectuó disparos de arma de fuego contra Nieri quien fallece en el lugar y hacia Bubacar quien muere minutos mas tarde en la guardia del Hospital de Emergencias Clemente Álvarez.
Al apodado Morocho también le atribuyeron que al día siguiente del doble crimen, a las 7 horas aproximadamente en calle Servando Bayo y Riobamba, cuando un grupo de atacantes a bordo de un auto conducido por L.M., el menor de edad imputado por la Justicia de Menores, se llegaron hasta el lugar y efectuaron disparos hacia los familiares de las víctimas, hiriendo de bala a uno de ellos.
La fiscal Fabbro acusó a Morocho por homicidio agravado por uso de arma de fuego e intervención de un menor de edad. El juicio está a cargo del tribunal compuesto por los jueces Hernán Postma, Nicolás Foppiani y Pablo Pinto.
