El hecho ocurrió el 19 de junio de 2021 cuando Silva prestó la moto de su hermana a dos individuos no identificados con la intención de cometer un asesinato.
Esa tarde, los perpetradores se colocaron al lado de un Chevrolet Corsa, dispararon contra Misael Faure, quien resultó gravemente herido y, finalmente, falleció el 9 de septiembre debido a complicaciones médicas. Posteriormente, devolvieron la moto a Silva.
El acuerdo entre el fiscal Adrián Spelta y el abogado defensor Leonel Iesari fue aceptado por Silva, quien admitió su participación en el hecho y consintió la condena de 13 años de prisión.
Este fallo destaca el rol de cómplices en la comisión de delitos violentos, sancionando no solo a los autores directos sino también a quienes facilitan los medios para su ejecución.
