La más grave de las preocupaciones de la Primera Junta de Gobierno fue protección del puerto, de la navegación y de las zonas ribereñas, que operando impunemente desde su seguro apostadero en Montevideo cometían depredaciones en el litoral fluvial.
El gobierno de Buenos Aires, carente de marina, se encontraba en la imposibilidad de oponerse a estos ataques y con el propósito de neutralizarlos nombró comisionado de marina al abogado salteño Fransisco de Gurruchaga con la misión de organizar una fuerza naval.
Con más entusiasmo que medios, Gurruchaga reunió una escuadrilla formada por tres pequeñas embarcaciones, malamente armadas y peor tripuladas, de la que dice John Street que estaba formada por pequeños botes sobrecargados de artillería y que su comando fue ofrecido a Thomas Taylor, no siendo aceptado por éste.
Si es esto cierto, es probable que Taylor, como experimentando marino que era, rachazara el amdno de la improvisada escuadrilla por considerarla inadecuada para oponerla a las poderosas naves de Montevideo, o porque su bisoña y heterogénea tripulación era incompetente para combatir contra la veterana y disciplinada tropa española.

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Top Tips to Reduce Your Blood PressureLa escuadrilla de formó con la goleta «INVENCIBLE», el bergantín «25 DE MAYO» y la balandra «AMERICANA» y su comando fue aceptado por el marino maltés Juan Bautista Azopardo, quien actuaba en el Río de la Plata desde los últimos años de la colonia. El 10 de febrero zarpó de balizas la improvisada fuerza naval. Henchía sus velas el cálido soplo de la brisa estival y era acompañada por los esperanzados buenos deseos de la ciudad, que desde la barranca del río la contempló partir.
Dos prácticos del río Paraná compartían la responsabilidad de su pilotaje: junto a su tocayo comandante Azopardo piloteaba la «INVENCIBLE», nave capitana, Juan Bautista Estigarrivia, que había abandonado la seguridad de su puesto de patrón en el bergantín «GÁLVEZ» para correr los azares de la guerra en defensa de la causa emancipadora y Basilio Xara que cumplía igual misión en el bergantín «25 de MAYO». No hay noticias de que la balandra «AMERICANA» fuera conducida por práctico. Era comandante del bergantín Hipólito Bouchard y de la balandra Angel Hubac.
Todos sabemos como terminó el 2 de marzo de 1811 frente a San Nicolás esta primer fuerza naval argentina; y no podía terminar de otra manera dada su tremenda inferioridad frente a la poderosa y aguerrida escuadra española.
Xara con otros tripulantes del «25 DE MAYO» se pudo a salvo huyendo a nado, pero Estigarrivia, luchando bravamente junto a su comandante fue herido y llevado prisionero a Montevideo, permaneciendo allí en las más penosas condiciones hasta el 6 de noviembre en que fue liberado y regresó al seno de su familia.
El sacrificio de este hombre humilde, primer héroe naval del practicaje en la guerra por la independencia argentina, fue compartido por su esposa y sus dos hijas, quienes durante los ocho interminables meses de su cautiverio sufrieron miseria y se vieron reducidas a vivir de la caridad.
Llegada a este afligente situación se dirigió al gobierno en los siguientes términos:»Da Justa Ferreira legítima muger de Dn Juan Bautista Atigarrivia, dice, que, su marido ha quedado prisionero de los Marinos en la goleta la Invencible, donde se hallaba en clase de Baqueano, desde este puerto, para acudir a la defensa de la armada Patria, con este acaecimiento él ha quedado en penosa esclavitud, y la interesada, a mendigar su sustento, y el de dos hijas: que ha dos semanas que presentó esta propia solicitud, que infiere se haya traspapelado, y pide se la asigne lo que S.E. tenga por conveniente».
Este segundo ruego parece haberse también extraviado , tal vez entre los numerosos papeles a que dio lugar el sumario instruido para deslindar responsabilidades por la derrota de nuestra primer fuerza naval o porque los hombres al frente del gobierno tuvieran problemas más graves que el de auxiliar a una pobre mujer desamparada por la ausencia de un héroe de la naciente patria.
Más tarde, en el mes de noviembre, ya liberado y reintegrado a su abandonado hogar, es el mismo Estigarrivia quien se dirige a sus jefes diciendo que «caído herido y prisionero el 2 de Marzo en manos de Marineros, ha estado padeciendo su penoso cautiverio hasta el 6 del presente mes de noviembre en cuyo tiempo se ha visto destituido de todo auxilio para su sustento, y para poder auxiliar a su desgraciada familia para todo lo cual suplica se le abone por ser comisionado de Marina los sueldos que tiene devengados y que su familia no ha tenido más socorro que el mes de febrero último».
Certificada por Gurruchaga la verdad de las afirmaciones del práctico una vez cumplido los inevitables trámites burocráticos, para los cuales no cuentan héroes, mártires o sacrificados, recién en diciembre se ordenó liquidar los sueldos adeudados.
No conocemos la fecha en que la orden de pago se hizo efectiva a este humilde servidor de la nueva patria, tampoco tenemos noticias de su posterior destino, pero si está probado que la derrota naval de San Nicolás fue el bautismo de fuego de nuestro servicio de praticaje y que en dicha acción el práctico del río Paraná fue uno de los primeros héroes navales y el primero que, como tal, honró esta actividad.
(*) Práctico del río Paraná y sus Puertos – Abogado
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