El presidente de YPF, Horacio Marín, le avisó anoche al gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, que en el caso de no mostrar su conformidad con el RIGI (Régimen de Incentivos a los Grandes Inversores), la planta de GNL (Gas Natural Licuado) que se plantea construir con Petronas, se terminará estableciendo en Río Negro, según declaró anoche al programa Odisea Argentina que se emite por el canal LN+.
Por eso dijo el ejecutivo: “Para que pongan esos miles de millones de dólares en Argentina y no en otro país necesitaban que sea rentable a bajos precios. Sin el RIGI, a 8 dólares por millón de BTU, no era rentable. Por lo tanto esos capitales no venían a la Argentina. Nosotros le mandamos una carta oficial a Kicillof y a Weretilneck que tiene tres puntos que son incentivos económicos para el proyecto y cuatro puntos de ayudas en permisos. Ellos van a contestar”, afirmó.
Después agregó: “Gustavo Gallino, que es el ingeniero que hizo el Gasoducto Néstor Kirchner en tiempo récord, vino a trabajar conmigo como vicepresidente de infraestructura. Él ahora encontró una ventaja para ver dónde hacer los gasoductos y en qué lugares y ahorros para el proyecto”, indicó, dando a entender que hay un cierto beneficio de la localidad de Punta Colorada sobre la ciudad de Bahía Blanca.
Para dejar en claro que el funcionario no hace ningún tipo de “lobby”, manifestó: “No descarto a nadie, obviamente tienen que adherir al RIGI. Si no lo hacen, ya se terminó la discusión. Si no adhiere la Provincia no hay que discutir nada, irá a la provincia que adhiera al RIGI. Es obvio, ¿quién va a poner la plata si no?”, remarcó, sabiendo que Kicillof, públicamente, ha mostrado su total rechazo al proyecto.
Finalmente contó los pasos a seguir: “Cuando digamos dónde es más rentable, la gente de YPF que trabaja en GNL se va a juntar con la gente de Petronas y una vez que está la decisión, yo voy a ir personalmente con cada uno de los gobernadores, le mostraré los números y luego lo haré público. Es el procedimiento y lo saben todos, acá nadie está jugando raro”, culminó Marín.