En la presentación de los patrulleros este martes, el gobernador Maximiano Pullaro habló en CNN Radio Rosario, sobre la situación penitenciaria en la provincia. “Las cárceles están superpobladas en Santa Fe porque no se construyeron obras públicas penitenciarias en cuatro años. Por este motivo, nosotros estamos llevando adelante la construcción de 4 mil celdas en diferentes puntos de la provincia, con lo cual se va a descomprimir para los cuatro o cinco años”, detalló el gobernador.
Y agregó: “El problema es que cuando hay una taza de encarcelamiento y va creciendo la población, obviamente hay que construir por más que no se luzca la obra pública. Ahora, en 5 meses no se puede, nosotros no tenemos salida”, sentenció el mandatario.
Además, en cuanto a número Pullaro destacó: “Hay un dato, un preso a la provincia de Santa Fe le sale 13.000 pesos, aproximadamente, tal vez un poquito más ahora por los aumentos, con lo cual nosotros estamos sosteniendo también el costo de los presos federales que deberían tenerlos el sistema nacional”.
En cuanto a la consulta sobre la obra que estaba en marcha, indicó: “La construcción de una cárcel federal se detuvo, no avanzó, es una obra que estaba haciendo el Gobierno Nacional. Ahora se encuentra en marcha nuevamente, está en un 92 por ciento, y se terminaría sobre fin de año. Pero es para casi 400 detenidos y en Santa Fe tenemos 700 presos federales, así que no alcanza para sacarlos del sistema penitenciario de la provincia”.
Respecto al personal a cargo de los fugados de la comisaría 5ta, el gobernador explicó: “No son penitenciarios, son policías, es una fuerza que no está preparada para cuidar a los presos, sino para demorarlo durante 6 horas y se supone que el sistema debe funcionar. Después lo debe decir un fiscal, por eso las comisarías son sistemas vetustos que debemos transformar. Hoy estamos trabajando en la construcción de estaciones policiales, tenemos dos, la del sur y sudoeste, son netamente operacionales, funcionarán como centro de denuncia territorial”:
Finalmente, recordó: “Cuando terminó la gestión en la cual estaba como ministro de Seguridad en 2019, no había más presos en las comisarias, algo pasó, cuando volví como gobernador había 2.000. Lo que sucedió en el medio fue que no hubo previsión política, ni planificación de la seguridad pública ni en la calle ni carcelaria”; cerró el gobernador.
