El suboficial Leandro Pucheta, uno de los dos policías imputados por un supuesto hecho de abuso sexual contra una compañera de la fuerza a la salida de un boliche sanlorencino, recuperó la libertad a partir de evidencia fílmica que acreditó que no se movió del puesto en donde realizaba tareas adicionales durante la madrugada del pasado 23 de diciembre. Por lo tanto se desvaneció la hipótesis de que habría filmado el ataque sexual contra la mujer en un auto estacionado a mitad de cuadra de avenida San Martín al 1700.
En la audiencia de revisión de la prisión preventiva realizada ayer en Tribunales de San Lorenzo, el defensor Pablo Morosano insistió en la carencia de evidencia, a partir del acceso a elementos de la investigación. Requirió la libertad de Pucheta debido a que no hay apariencia de responsabilidad alguna, confiaron voceros judiciales.
Durante la audiencia del pasado 3 de febrero, el suboficial Pucheta declaró ante la jueza Strólogo: “A la chica que nos acusa la sacaron del boliche porque estaba mal, ebria, desalineada. Luego lo veo a «Murci» (así lo apodan al subinspector José Matías Roldán) que la agarró para que no pase vergüenza, la llevó a mitad de cuadra y la dejó dentro del auto. Jamás dejé mi puesto de servicio adicional. En ningún momento estuve en el hecho”, declaró el uniformado acusado de haber filmado el ataque sexual con su celular.
El fiscal Aquiles Balbis, en reemplazo de su par Maximiliano Nicosia, señaló que no se opondría a la petición de libertad. Y anticipó que también requerirá audiencia para atender la situación cautelar de Roldán, el otro policía imputado, abundaron fuentes tribunalicias.
“Entré al boliche, cobré mi adicional y me fui a mi casa de Capitán Bermúdez. En el auto llevé a un personal de seguridad que trabaja en el boliche, llamado Lucas”, añadió Pucheta cuando en la audiencia anterior se lo consultó por lo ocurrido entre las 4 y las 4.42 de la madrugada del aquel 23 de diciembre.
A partir del avance de la investigación, que permitió acreditar que habían sido modificados los elementos de cargo, Balbis atribuyó el pedido de libertad para Pucheta tras una intervención conjunta con la jefa de fiscales Natalia Benvenuto, del chequeo de la información con colaboración de la defensa, añadieron voceros.
A su turno, Morosano dejó en claro que en el video de cámaras de videovigilancia de la cuadra pudo observarse a Pucheta en casa minuto en donde estuvo al momento de hecho, constatándose que nunca estuvo realizando filmación alguna, que resultó la base fáctica de la imputación.
Al momento de la resolución, la jueza Strólogo manifestó que no existían dudas para corresponder la inmediata libertad de Pucheta, entendiendo la gravedad institucional y humana al tomar medidas cautelares que son gravísimas y fundadas por la solvencia que tuvo el fiscal (NdR: por Nicosia, a cargo de la investigación) al momento de peticionarla, indicaron fuentes judiciales.
Por último advirtió Strólogo que cuando desaparece dicha solvencia se da lugar a la revisión inmediata de la prisión
preventiva. Y no dejó dudas de que con la misma celeridad desaparecerá y se desafectará a Pucheta en el legajo fiscal.