El primer hecho ocurrió en la madrugada del lunes, cuando una vecina que se encontraba en su casa sobre calle Juárez Celman escuchó un fuerte estallido frente a su domicilio. Al asomarse, vio a un desconocido huir corriendo y luego constató que su auto, un Chevrolet blanco, había sido prendido fuego con un bidón de nafta. Junto a su esposo logró apagar las llamas con un balde de agua y pidió asistencia a Bomberos y Policía de Ricardone. El vehículo sufrió daños en la parte trasera y el baúl.
Este martes por la tarde, alrededor de las 19:15, se registró otro ataque en la intersección de Eva Perón y Benvenuti, también en Ricardone. Según testigos, dos autos comenzaron a prenderse fuego y las unidades móviles alertadas por el 911 confirmaron el siniestro. Aún no hay datos oficiales sobre los autores ni la relación entre los vehículos atacados.
¿Casualidad o mensaje?
No descartan que los incendios hayan sido intencionales y vinculados a la coyuntura electoral. “Este tipo de atentados con fuego contra vehículos estacionados ya se han registrado en campañas anteriores, especialmente en comunas y localidades donde el mapa político está en plena disputa”, indicó una fuente muy conocedora del ambiente electoral.
Ricardone, como otras comunas del departamento San Lorenzo, transita un proceso electoral caliente con internas cruzadas, alianzas quebradas y acusaciones subterráneas que ya en otras oportunidades derivaron en actos intimidatorios.
El fantasma de 2023
Uno de los antecedentes más recordados en el Cordón Industrial fue el intento de asesinato de Brenda Giles, en San Lorenzo, quien fue atacada durante el final de la campaña de 2023. El atentado provocó una reacción inmediata con un corte de la autopista Rosario-Santa Fe a la altura de San Lorenzo y una fuerte presión pública para que el entonces gobernador Omar Perotti restituyera el patrullaje en la ciudad, que había sido prácticamente abandonado.
Ese episodio marcó un antes y un después en la relación entre la provincia y la región. Muchos señalaron a Perotti por tratar al departamento como un “coto de caza político”, donde las internas del PJ provincial se trasladaban al territorio sin importar las consecuencias.
La vuelta de los fantasmas
El fuego, una vez más, vuelve a poner en alerta a la ciudadanía. La metodología —bidones con nafta, autos incendiados de madrugada, ataque relámpago sin robo ni amenazas previas— es un patrón que se repite desde hace años como forma de presión, castigo o advertencia en el marco de campañas electorales calientes.
En este contexto, los vecinos piden respuestas: “Hoy fue un auto, mañana puede ser una casa”, expresó un residente de Ricardone en redes sociales.
Silencio oficial y campaña caliente
Por el momento, ninguna autoridad comunal ni referente político local se pronunció sobre los hechos. Tampoco hay detenidos ni información oficial que conecte los dos ataques. Sin embargo, los rumores corren: las sospechas de que se trata de mensajes políticos o disputas internas ya empezaron a recorrer pasillos y grupos de WhatsApp.
La campaña electoral en Santa Fe ya entró en su fase más caliente. En el caso de Ricardone y otras comunas del Cordón, esa temperatura parece haberse materializado en fuego.
