Durante décadas el país vive del stock de obras de infraestructuras realizadas en épocas de una Argentina que se pensaba como potencia exportadora. Hoy no hay más stock´s, las ruta comienza a ser trampas mortales improductivas que convierten al país inviable para competir con competidores como Brasil o EEUU.
Comparto video de un camionero de Reconquista.
Argentina luego de 20 años K. pic.twitter.com/Tu4sqCFtbS— Juan Martín Perkins (@JuanMPerkins) April 15, 2024
La ruta 11 está destrozada en todo la extensión del corredor con un punto crítico a la llegada de los camiones a los puertos del Cordón Industrial, uno es el puente de Villa La Ribera sobre el río Carcarañá y el otro el puente que divide a San Lorenzo con Puerto San Martín sobre el Arroyo San Lorenzo.
Decadencia dirigencial
La dirigencia política y empresarial en Argentina lleva décadas discutiendo temas sólo de coyuntura económica sin posibilidad de pensar temas de largo y mediano plazo que ayude a un plan de inversión que nos permita ser una potencia exportadora. El hub portuario de Timbúes es un claro ejemplo, las empresas llevan invertidos más de 3.500 millones de dólares en instalaciones industriales porque los favorece la profundidad del calado natural del Río Coronda sin invertir ni dar las condiciones para que los cientos de miles de camiones llegue a sus complejos.
Esta disociación entre la inversión privada y la pública tiene su principal deficiencia en la falta de territorialidad de las altas direcciones de estas compañías multinacionales. Para dar un ejemplo muchas de ellas deben reportar por email diariamente a países que están a miles de kilómetros para tomar decisiones micro de gestión diaria como la compras de insumos de oficina, estas estructuras elefantizacicas hicieron que hoy la región se encuentre al borde del colapso logístico.
La energía del lobby de la industria está focalizado en poder hacer rentable el negocio revirtiendo decisiones de políticas económicas nacionales como por ejemplo son los tipo de cambios del dólar, la falta de reservas del banco central y/o la hidrovía privada o estatal. El ejemplo tal vez más palpable sea el oligopolio del manejo de los trenes un factor clave de la logística granaria una fuente que conoce muy bien la industria siempre ratifica el concepto “Las ABC (ADM, Bunge y Cargill) son empresas de génesis familiar que terminan dirimiendo enconos entre estas dinastías globales en lugar de trabajar como una corporación global de alimentos”