Que el robo de cables de los tendidos públicos ya no es novedad, se sabe, pues cada vez se suceden con más asiduidad.
Ahora, que el atraco sume 4.000 metros lineales, esto es 4 kilómetros de largo, es algo que hasta ahora no se había observado.
El hecho aconteció entre el lunes y martes pasado, según calculan fuentes policiales.
El sitio elegido fue una zona rural en jurisdicción de Monje.
Los cables eran propiedad de la Empresa Provincial de la Energía y abastecían el servicio de agua corriente hasta la toma que posee la Cooperativa local.
Estaban dispuestos en columna de gran altura, por lo que los delincuentes dispusieron de la suficiente logística como para llevar adelante, con éxito, el ilícito.
De mínima contaron con conocimientos aparatos para manipular la electricidad, y así también con elementos para enrollar semejante cantidad de cables y asimismo poder luego transportarlo.
A modo de ejemplo, 4.000 metros es algo así como la distancia existente sobre la avenida San Martín, en San Lorenzo, desde su intersección con la ruta A012 hasta el arroyo San Lorenzo.
“Uno de los campos donde entraron (los ladrones) es de de mi papá; cortaron los alambrados para cruzar desde un campo a otro. Mi esposo avisó a la comisaría y luego se comunicó con la EPE”, confió una vecina que hizo la denuncia.
Los delincuentes aún no fueron identificados.
Fuente: IRE
