Con la mirada puesta en los desafíos de la transición energética, se realizó una nueva edición de “Será Sustentable 2025”, el encuentro organizado por la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA, junto al Centro de Desarrollo Sustentable (GEO) y Urban Sustainability. La jornada reunió a especialistas, académicos y empresarios para debatir sobre el futuro de las energías limpias y los caminos hacia una economía más sostenible.
El evento, que se desarrolló en la sede de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA, contó con la participación de investigadores, funcionarios y representantes de empresas de diversos sectores, y puso en agenda la necesidad de acelerar la transición hacia fuentes de energía más limpias y modelos de producción sostenibles.
Uno de los paneles centrales fue “Más allá de lo conocido: energías no convencionales”, que contó con la participación de Claudia Kalinec, directora de Grupo Pelco y presidenta de la Cámara Argentina de Tratadores y Transportistas de Residuos Industriales y Especiales (CATRIES). Su exposición fue acompañada por distintos referentes del sector que también expusieron puntos centrales de este debate como Ziomara Mathey-Doret, responsable de Sustentabilidad de Grupo DH-SH; Javier Chincuini, de la Cámara Argentina de Energías Renovables (CADER), y Adrián Noremberg, de Eittor.
Residuos que no se tratan
Durante su exposición, Claudia Kalinec advirtió sobre la brecha que aún persiste entre el discurso y la práctica en materia ambiental. En un estudio que la Cámara realizó junto con los observatorios de residuos de la UNR y la UBA se evidenció que se trata menos del 10% de los residuos que generan las empresas. Es decir que más de un 90% de los residuos industriales hoy tienen una disposición final inadecuada, generando altos problemas de contaminación ambiental y consecuencias en la salud de las personas.
“Generamos energía con un porcentaje, pero el otro gran porcentaje que no se puede recuperar ni reciclar ni siquiera es tratado de forma correcta con un operador habilitado. Se vuelcan en el río. Eso también es greenwashing en las empresas: mostramos la gestión de nuestros residuos a partir de la energía que generamos, pero el 90% restante se dispone de manera ilegal. Estamos muy lejos de una gestión sustentable de los residuos”, advirtió la presidenta de Catries.
La referente en el tratamiento de residuos industriales también continuará profundizando sobre esta problemática en el Foro de Economía Circular y Gestión de Residuos, organizado por CIMPAR y CATRIES, que se realizará el 12 de noviembre en el Auditorio del Banco Municipal de Rosario, donde especialistas del sector público y privado debatirán sobre estrategias para transformar residuos en recursos productivos.
Nueva vida para el aceite vegetal
Por su parte, Ziomara Mathey-Doret, responsable de Ambiente de DH-SH, abordó su exposición contando acerca de la campaña Reciclá tu Aceite, que la empresa impulsa desde el 2017 como un proyecto de recolección de aceite usado de cocina en Santa Fe y que en la actualidad llega a 15 provincias del país. La iniciativa incluye la instalación de puntos verdes para la comunidad, la gestión de aceite vegetal usado para grandes generadores y la implementación de un programa de educación ambiental para escuelas
“Firmamos más de 140 convenios con municipios, desarrollamos 400 puntos verdes y llegamos a casi 5.000 estudiantes en escuelas con nuestras capacitaciones. El aceite usado de cocina que recolectamos es acondicionado como materia prima para la producción de biocombustible de segunda generación. La transición energética es posible; lo que vemos es que, por ahora, la mayor demanda es internacional”, aseguró la especialista ambiental.
“Será Sustentable 2025” se consolidó así como un espacio de referencia para el intercambio de experiencias y la articulación entre el sector público, privado y académico, en busca de soluciones integrales frente a la crisis climática y ambiental. El encuentro dejó una conclusión clara: no hay sostenibilidad posible sin coherencia entre lo que se dice y lo que se hace. Mientras la transición energética avanza en los discursos, los datos sobre residuos y contaminación revelan la urgencia de pasar del debate a la acción.
