Mano a mano

Sica: «Queremos una industria moderna, integrada al mundo y competitiva»

El ministro de Producción de la Nación habló con BCR News sobre los desafíos futuros en materia económica y la necesidad de llegar a un consenso político


En exclusiva con BCR News, el Ministro de Producción de la Nación, Dante Sica, hizo un diagnóstico de la economía argentina y dialogó acerca de las vicisitudes de la coyuntura, las oportunidades que genera la apertura de mercados y la necesidad de modernizar el modelo industrial. “Queremos una industria moderna, integrada al mundo, competitiva y que acompañe en el desafío de llegar a la industria 4.0”, destacó.

– ¿Me daría un diagnóstico de donde estamos parados desde el punto de vista económico?

La economía ha sufrido cambios muy importantes a partir de lo que fueron las PASO. Muchos argentinos tuvieron que tomar acciones para frenar procesos de inversión, estar un poco más a la expectativa y el mundo claramente nos cerró. Una semana antes de las PASO hicimos una renovación de bonos y Lecaps en el mercado interno de casi 90%, en cambio, la primera renovación después de las elecciones fue del 5% de los títulos. No solo era la mirada que hicieron los externos, los mercados son binarios y a veces ajustan inmediatamente. El mercado interno generó esa desconfianza con respecto a lo que podría venir.

– ¿Qué le pasa a la Argentina que trae décadas de decadencia, que se cortan por períodos breves y viene con problemas de hace tiempo?

La clase política no ha logrado consensuar con el resto de los sectores sociales un modelo de crecimiento de economía política que garantice la creación vigorosa de empleo formal y el crecimiento de la inversión. Se ha generado una situación de bajas tasas de inversión, productividad, y eso ha obligado a que cada día nos cerremos más y no hemos generado una economía abierta integrada al mundo y estable. De 1983 hasta la fecha le sacamos 13 ceros a la moneda, Argentina es un país que no tiene moneda y sin esto no hay mercado de capitales: “la gente no tiene crédito para comprarse una casa, un auto, las empresas no pueden crecer y los emprendedores no tienen el capital inicial para desarrollar sus productos”. Entonces un acuerdo político en términos de que la estabilidad es un bien supremo social que es lo que nos va a permitir crecer hacia adelante, construir las bases solidas de la expansión y lo principal, generar empleo formal y decente para todos los habitantes es nuestra gran deuda y nuestro gran desafío hacia adelante independientemente del gobierno.

– Es cierto que nunca se ha logrado un pacto económico-social. ¿Qué debería hacerse entonces para que finalmente funcione?

Desde que asumimos estamos planteando tener un acuerdo con las distintas fuerzas políticas y sociales y lamentablemente no lo hemos conseguido. Lo intentó Macri cuando asumió, después de las elecciones del 2017 intentamos construir los consensos políticos y hace menos de 3 meses, lanzamos al menos 10 puntos básicos sobre la cuestión económica que lo que queríamos era generar el consenso de la clase política. No estoy hablando de cuestiones que hacen a la direccionalidad de la política en temas muy específicos, porque cada uno tiene la libertad de tener opiniones distintas. Pero creo que hay países donde el equilibrio presupuestario, tener cuentas sanas, no utilizar el Banco Central como una fuente permanente de financiamiento, cuidar la moneda, tener una mirada con respecto a las exportaciones, la transparencia a las reglas del juego, son el consenso básico que nos permite tener una economía estable. Y lamentablemente esos 10 puntos que fueron apoyados por los sectores empresariales, que hubo cierto consenso con la CGT, no lo logramos con las fuerzas políticas.

– ¿Qué pasó con la CGT en los últimos días?

Yo creo que hubo siempre malos entendidos, en especial con la UIA. Este gobierno siempre ha puesto a la industria dentro del conjunto de actores importantes para poder tener un programa de desarrollo. El crecimiento de la economía no se puede hacer sin la industria. Los grandes sectores que traccionan, vaca muerta, la minería, el agro, el turismo, son todos grandes demandantes del sector industrial y este tiene un rol importante. Siempre se ha malentendido está relación y la UIA en especial, pero el resto de las cámaras han tenido una mirada distinta de lo que hemos hecho. Muchos sectores reclaman que no tenemos una política industrial, claramente, si la política industrial es un país cerrado, subsidiado y querer tener discrecionalidad para elegir quienes ganan y quienes pierden, a qué precio tienen que vender y comprar y cuánto tienen que ganar: claramente no tuvimos ni vamos a tener una política industrial en ese sentido. En cambio, venimos trabajando en una política de desarrollo moderna , quizás no venimos avanzando en la velocidad que hubiéramos querido, porque requerían consensos legislativos que no hemos conseguido. Queremos una industria moderna, integrada al mundo, competitiva y que acompañe en el desafío de la industria 4.0.

– ¿Suponiendo que ganan la elección, sobre qué base debería hacerse el mandato del presidente Macri en virtud de las actuales circunstancias?

Primero que nada seguimos trabajando y gobernando esta es nuestra gran responsabilidad. Estamos atendiendo una coyuntura no deseada, estamos tomando medidas a corto plazo para atenuar y morigerar el impacto que ha sido el cambio de las condiciones económicas producto de la elección sin dejar de mirar el largo plazo. Ninguna de las políticas que tomamos al corto plazo lesiona nuestra mirada del largo plazo. No estamos tirando la casa por la ventana para tener una chance electoral.  Y lo que viene ahora es una nueva etapa, estos tres años y medio nos han permitido sentar las bases de los cambios en mucho de los sectores que nos permitan poder entrar ahora con una agenda de desarrollo mucho más profunda. Que implicada darle una política diferencial a las pymes, poner el foco de atención en la generación de empleo, tratar de bajar los costos extra salariales, poder trabajar en una agenda de modernización en nuestras relaciones laborales junto a los empresarios y los sindicatos. El cambio tecnológico todos los días nos pone ante desafíos. No solo de procesos de automatización dentro de las distintas cadenas sino la aparición de nuevas formas de economía como son las economías de plataformas las cuales tenemos que regular a fin de que mantengan la voluntad del trabajo decente y seguir promoviendo este salto exportador. Si no logramos que la economía de un salto exportador y en especial trabajando con las PYMES, va a hacer muy difícil que tengamos sustentabilidad macroeconómica en mediano pazo. Por eso todas las medidas que estamos tomando, son parte de la agenda global que nos va a permitir esta segunda etapa.

– Hemos visto la apertura de muchos mercados. Están faltando reformas en el plano laboral e impositivo. ¿Cómo se hace ese equilibro para aflojarle la presión al sector privado sin que genere déficit en el sector público?

Nosotros requerimos tener un estado mucho más moderno y mucho más eficiente. El gran desafío no es solo lograr el equilibrio presupuestario sino de mejorar la eficiencia de los servicios que presta . Además, el equilibrio presupuestario no es una responsabilidad del gobierno nacional solamente, esto tiene que transmitirse a las provincias. Ingresos brutos es uno de los grandes impuestos que ahoga básicamente a gran parte de la producción.

– ¿Qué opina respecto al fallo de la Corte Suprema?

Nosotros más que bajar el impuesto queremos tomar medidas para llevar alivio a la población ante el cambio brusco inesperado de la economía. Y el federalismo implica una responsabilidad y una mejora cuando los ingresos crecen y los repartimos, pero a la gente que nosotros los ayudamos bajando el IVA en los alimentos o bajando el mínimo no imponible en ganancias viven en cada una de las provincias donde los gobernadores pertenecen, donde muchos de la oposición pedían la mismas medidas que estamos tomando nosotros ahora por la emergencia. Hay una falta de solidaridad, con respecto a la situación que estamos viviendo y un aprovechamiento del momento político. Todos tenemos que hacernos cargo por solidaridad del momento que estamos viviendo.

– Se generó alguna tirantez por la eliminación del diferencial de exportación entre el poroto y la harina. ¿Va a haber alguna novedad con eso?

Eso era un tema que generaba rispideces entre el sector productor y el de la industria. Era algo que nos impedía la exportación mucho más abierta en otros mercados. Con esto hemos eliminado una de las principales causas que le impedían a un sector que es netamente exportador poder ingresar a mercados tan importantes como es el mercado de Estados Unidos y Europa.

– La relación con Brasil a partir del acuerdo del sector automotriz parece estar bastante estrecha. ¿Cómo vienen trabajando esa relación?

Con Brasil hemos logrado ya en la presidencia de Michel Temer pero mucho más afianzado en términos de lo que es el modelo hacia al cual queremos avanzar con la presidencia de Bolsonaro. Estamos trabajando en modernizar lo que es el Mercosur. El Mercosur ha tenido una estrategia en los últimos 10 y 12 años errada en términos de cerrarse sobre sí mismo y eso ha demostrado que no solo no nos ha permitido poder crecer sino que ha aumentado la falta de productividad que tienen gran parte de nuestros sectores productivos. Estamos en un proceso de mayor integración al mundo y tenemos una agenda muy dinámica de negociaciones hacia adelante y por otro lado queremos modernizar la forma en la cual tomamos decisiones. Tenemos que tener un Mercosur mucho más dinámico, ágil y flexible que nos permita poder responder ante estos cambios, las oportunidad que este mundo bipolar en el cual estamos sumergidos entre la relación de EEUU y China nos permite construir para poder crecer. Con respecto al acuerdo con la UE creo que va a ser un antes y un después de lo que es nuestra relación y nuestro proceso de integración al mundo. Aprovechar la potencialidad que tienen los mercados como el mundo Árabe, el continente africano los cuales la región no ha tenido una fuerte inserción y también aprovechar la potencialidad de mercados que vienen creciendo en los últimos años, lentos pero consistentemente como es el mercado de América Latina.

Fuente: BCR News

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